Ciudad de México 20 Octubre (MENSAJE POLÍTICO/CÍRCULO DIGITAL).-Los pobladores de la alcaldía de Iztacalco están condenados a seguir viendo el deterioro de esta zona de la Ciudad de México ante la inacción del alcalde, Raúl Armando Quintero Martínez.
Recientemente, Quintero Martínez ofreció su primer informe de gobierno, y como es costumbre, las pequeñas cosas que ha hecho las engrandece intentando engañar a los pobladores que ya no le creen y solo esperan que pronto se terminen los tres años de su alcaldía para que permita el paso a alguien, que no sea de su grupo, para que llegue a solucionar los problemas que persisten en la alcaldía.
Quintero Martínez ocupa el mismo discurso de Andrés Manuel López Obrador, sacudirse la responsabilidad del cargo asumido y echar la culpa a las anteriores administraciones, que dejaron, según él, un desastre en Iztacalco.
Considerado como un “virrey” en la zona, pues durante varios años ha sido quien asigna a los nuevos titulares en el gobierno de Iztacalco, ahora pretende engañar a la gente y sacudirse su responsabilidad por el deterioro que él y su camarilla de políticos han dejado por su paso en la ex delegación y ahora alcaldía.
INICIO DE UNA HISTORIA DE DESASTRE EN IZTACALCO
La historia comenzó en 2003 cuando Quintero Martínez asume como jefe delegacional de Iztacalco, fecha que marcaría el inicio de un retroceso para esta zona que durante años se había convertido en un lugar de desarrollo social y económico, contando con espacios para la construcción de unidades habitacionales para trabajadores, que podrían contratarse en las dos zonas más importantes de Iztacalco: Granjas México y Agrícola Oriental, ahora convertidas en terrenos para grandes construcciones inmobiliarias.
Sin embargo, la mala aplicación de los recursos públicos para realizar un ordenamiento en el desarrollo urbano y la necesidad de realizar las llamadas “obras de relumbrón” sin ningun beneficio para la calidad de vida de la población, permitió que el “virrey” pudiera casi convertirse en el dueño del destino de Iztacalco y sus pobladores.
Para cumplir este objetivo, Quintero Martínez se rodeó de gente que fueron sus incondicionales creando su propia corriente al interior del PRD, Unidad y Renovación (Unyr), y por supuesto el inicio de su virreinato.
Así gente como los hermanos Ensástiga, Santiago, Erasmo y Gilberto, junto con Francisco Sánchez Cervantes y los jóvenes Elizabeth Mateos y Carlos Estrada, fueron el grupo que gozaron y gozan del poder de Quintero Martínez en Iztacalco alcanzando a ocupar también el puesto de delegados de la demarcación.
Un personaje casi emblemático en este grupo es Fernando Rosique Castillo, quien fue alcalde interino de mayo a septiembre en 2009 y ocupó las plazas de Director Jurídico y de Gobierno cuando Armando Quintero Martínez fue delegado, después como Director General de Administración, puesto que actualmente desempeña en la alcaldía. El Maestro en administración y licenciado en economía, es el encargado de manejar las finanzas no solo del grupo sino de la delegación hoy alcaldía desde el 2005.
Esta camarilla, que conserva las viejas prácticas de mantener en la nómina de la alcaldía a amigos, compadres, parientes y recomendados, que poco conocen de sus funciones pero cobran, siguen viviendo del erario público sin rendir verdaderas cuentas a la gente.
RESULTADOS DE LA CAMARILLA
Fue precisamente desde el inicio de este siglo cuando los pobladores de Iztacalco recienten de manera importante el desdén de Quintero Martínez y sus amigos al frente del gobierno.
El narcomenudeo, producto de cerrar los ojos desde un principio, ante los primeros indicios de que las calles de las colonias de Iztacalco eran tomados por grupos delincuenciales que fueron entrando como la humedad, poco a poco, ahora mantiene a los pobladores con la zozobra de quedar en medio de un tiroteo entre bandas contraías de narcomenudistas que luchan por adueñarse de las colonias para poder seguir vendiendo sus productos, haciendo daño a los niños y jóvenes, principales objetivos de estos delincuentes.
Colonias tan viejas como los barrios de Iztacalco, han visto el enfrentamiento entre delincuentes que por distintas razones no son reportadas ni denunciadas, principalmente porque estos delincuentes viven en la misma zona y conocen a todos los vecinos intimidándolos y advirtiendo consecuencias a sus familias de quien se atreva a denunciarlos.
Colonias como Agrícola Oriental, Agrícola Pantitlán también han sido dañadas por el crimen organizado y la cercanía de estas con ciudad Nezahualcóyotl, hacen casi imposible detener a estos delincuentes, quienes ante la falta de una estrategia de cooperación pasan de la Ciudad de México al Estado de México para evitar su detención.
A esto se suman los asaltos en todas sus modalidades que sufren no solo los pobladores de Iztacalco sino la gente que por alguna situación, laboral, comercial, empresarial o educativa, tiene que trasladarse a esta zona.
Son en las zonas aledañas al metro Iztacalco de la línea 8 del metro y en las rutas de microbuses que pasan por los siete barrios de Iztacalco, Canal de San Juan por el CCH-Oriente, canal de Tezontle, entre otras, donde los focos rojos marcan la urgencia de ser atendidas, pero Quintero Martínez hace caso omiso, aduciendo que le corresponde a la jefatura de gobierno resolver el problema, lo que hacen las alcaldías es la prevención del delito, acto que tampoco hace, pese a manifestar que se han contratado elementos de la policía auxiliar para realizar rondines en los focos rojos.
Quintero Martínez en su momento dijo que iba a entregar información a las autoridades locales y federales para combatir la inseguridad en la demarcación, que la misma población se la daría de manera anónima, sin embargo, parece ser que no tuvo eco o no la hizo.
Cabe señalar que Iztacalco es una de las alcaldías que presentan un alto indice en asaltos a usuarios de transporte público.
En Iztacalco y de acuerdo a cifras de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJCDM), hasta diciembre de 2018 se iniciaron 931 carpetas de investigación, de las cuales 12.1% son delitos de alto impacto, 87.9% de los conocidos como de bajo impacto.
Otro gran problema es la falta de mantenimiento de infraestructura urbana, que solo se pretende solucionar con la entrega de pintura, para “que se vea bonita la alcaldía”.
La falta de servicios públicos, como el agua, cada vez es más constante, como consecuencia de una mala planeación del crecimiento y desarrollo urbano.
Quintero Martínez, poco o nada ha realizado en atender las demandas vecinales de Iztacalco, como son la repavimentación de calles, bacheo en la vialidades, servicio de limpia en gran parte de las calles ocasionando basureros clandestinos en todas las colonias y en áreas recreativas, y para supuestamente resolver el propblema, en el mejor de los casos, se les toman los datos a los vecinos sin señalarles el tiempo de espera y solución a su problema.
Quintero y su gente tienen un negro pasado en Iztacalco, donde aún se recuerda la tragedia del estallido en el año 2010 de una fábrica clandestina de pirotecnia, ubicada en Sur 157 número 1425 y Oriente 120, colonia Gabriel Ramos Millán, donde fallecieron varias personas, una de ellas menores de edad. Los moradores de la zona denunciaron la existencia de varios negocios de esta índole por más de 15 años, pero ni el entonces perredista y su ahijado político el entonces delegado Francisco Sánchez, hicieron algo, incluso el segundo mediante un comunicado se deslindó del problema, en tanto su protector permanecía tranquilo en la Secretaría de Transporte y Vialidad (Setravi) ahora Secretaría de Movilidad (Semovi), que a decir de agrupaciones de taxistas concesionados y “piratas”, realizó un negocio de gran fortuna.
En el caso del ambulantaje este ha tenido un gran auge principalmente en el tianguis que se pone en la zona limítrofe entre Iztapalapa e Iztacalco, donde el paso al peatón y automovilistas por canal de Apatlaco se ha convertido en viacrucis, ante la extensiones de los comerciantes informales, quienes dicen pagan buenas cantidades a sus líderes para repartir entre las autoridades entre 80, 100 y 150 dependiendo el tamaño del lugar y el producto que se ofrece, sin tomar en cuenta los cobros por “derecho de piso” del hampa organizada, con la complacencia de las autoridades de la Alcaldía, gobierno central y federales.
LAS ZONAS CON FOCOS ROJOS
En la alcaldía de Iztacalco hay sitios considerados de muy alta peligrosidad, como las dos Agrícolas, en una de ellas quedó en la mente de la ciudadanía la difusión de un video donde se muestra cómo en segundos dos sujetos asaltan a un estudiante de 12 años quien caminaba con su mochila y portando uniforme en una calle de la Agrícola Oriental, le despojan de sus pertenencias.
Análisis de especialista en seguridad refieren que en la colonia Agrícola Oriental hasta el año pasado, se cometieron más de 240 ilícitos, de los cuales 6 de 11 delitos manifestados por las autoridades, de ellos destacan 160 vehículos robados, 65 robos a transeúntes, 48 negocios asaltados, y dos pasajeros de taxi despojados de sus pertenencias, así como nueve homicidios y nueve lesionados por disparo de arma de fuego.
Mientras que en la colonia Agrícola Pantitlán se refieren 142 delitos.
Cruzando la calzada Ignacio Zaragoza está la Agrícola Pantitlán, donde se presentaron la mayoría de robos a pasajeros en microbús en las cercanías de las instalaciones del Metro, con 11 y dos carpetas, respectivamente. Además, dentro de su territorio hubo siete asesinatos, 55 vehículos robados, 44 transeúntes asaltados y 16 negocios atacados.
Le siguen la colonia Unidad Infonavit Iztacalco con 58 delitos, destacando 26 robos de vehículos con y sin violencia, y siete asaltos a pasajeros a bordo de microbús, Granjas México con 54 delitos, en este sitio se encuentran dos de los principales sitios de entretenimiento de la metrópoli y del país, el Foro Sol y el Palacio de los Deportes, la inseguridad aqueja la zona al contabilizar 30 carpetas por robo a transeúntes con y sin violencia, 14 vehículos robados, y 8 negocios asaltados.
Campamento 2 de Octubre con 51 delitos, es considerada una de las cinco más peligrosas de la capital debido a sus altos registros de homicidios dolosos, asaltos a transeúntes, transporte, robo de vehículo, narcomenudeo, algunas de las víctimas más propicias son los alumnos de secundarias de la zona, del Colegio de Bachilleres número 3 y el CETIS 66.
Otras colonias peligrosas aledañas son los Picos I y II Iztacalco, Juventino Rosas, Carlos Zapata Vela, Gabriel Ramos Millán, Tlacotal, entre otras.
El alcalde de Iztacalco, Armando Quintero Martínez, mantiene sin responder a los pobladores de esa demarcación, luego de que durante su campaña política y a pocos días de haber tomado protesta como alcalde declaró que metería a la cárcel a funcionarios públicos de anteriores administraciones que hubieran caído en delito, refiriéndose a la ex pareja Elizabeth Mateos y Carlos Estrada.
Sin embargo, esto solo se quedó en demagogia política y hasta el momento esta ex pareja sigue operando en las calles de Iztacalco para conseguir votos para su siguiente paso político en especial de Elizabeth Mateos.
Pero más allá de la las declaraciones, el alcalde no podrá actuar en contra de Mateos y Estrada, porque sabe que esta pareja conoce mucho de la forma de trabajar de Quintero Martínez y gente que ha rodeado al mismo Armando desde hace varios años.
Así las cosas, los pobladores de Iztacalco esperan que transcurra rápido el tiempo de Quintero al frente de la alcaldía y deje de seguir decidiendo el destino de una zona de la Ciudad atrapada entre la inseguridad creada por grupos delincuenciales y la corrupción de una camarilla política.
