Al primer trimestre de 2017, remesas incrementaron 7 por ciento respecto a igual periodo del año pasado: CEFP
CIUDAD DE MÉXICO, 26 de mayo, (ESFERA EMPRESARIAL / CÍRCULO DIGITAL).- El Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP), de la Cámara de Diputados, reveló que al primer trimestre de 2017 el total de remesas fue de 6 mil 639.6 millones de dólares (mdd), lo que significó un incremento de 7 por ciento respecto a igual periodo de 2016.
En su “Boletín: Situación del Sector Externo. Remesas Familiares, 2017/Trimestre I”, el CEFP detalló que, por entidad federativa, las que recibieron un mayor monto fueron Michoacán, Jalisco, Guanajuato, Estado de México y Puebla.
Los estados con mayor pobreza, Oaxaca, Guerrero, Puebla, Michoacán, Veracruz y Zacatecas se encuentran dentro de los que tienen mayor recepción de ingresos por remesas, arriba de la media a nivel nacional.
En marzo de 2017, las remesas representaron un total de 2 mil 520.3 mdd, con lo que se observó un repunte de 15.1 por ciento anual, después de una contracción de 1.2 por ciento en febrero. En noviembre de 2016 y marzo de 2017 se registraron mayores montos por envío, de 319 y 316 dólares en promedio, respectivamente, niveles que no se observaban desde julio de 2012.
El CEFP precisó que entre el año 2000 y 2016, las remesas familiares aumentaron a una tasa media anual de 9.2 por ciento, al pasar de 6 mil 572.7 mdd a 26 mil 972.4 mdd en ese orden, registrando en el último año su nivel máximo histórico.
Las remesas recibidas en dólares se han visto favorecidas en los periodos en que se ha presentado una apreciación del dólar ya que, en pesos corrientes, se incrementa el valor local que, junto con una menor inflación, acrecienta el poder adquisitivo de los hogares receptores.
“Esto ejerce efectos positivos más prolongados en la economía al incentivar un mayor gasto de consumo privado, que se traduce en un factor de estímulo a la demanda interna, abundó.
El Centro de Estudios de las Finanzas Públicas puntualiza que del total de remesas recibidas por los hogares, 56.2 por ciento se destina a los ubicados en zonas urbanas, en tanto que el 43.8 por ciento, se dirige a las rurales.
La entrada de ingresos por remesas representa casi el total de las transferencias hechas del extranjero al país y permite un saldo superavitario en la balanza de estas últimas a lo largo de los últimos 16 años; por tanto, ha coadyuvado a reducir el déficit de la cuenta corriente originado por las otras balanzas como la comercial, de servicios y renta.
Tan sólo en 2016, las remesas alcanzaron un total de 26 mil 970 mdd, cifra mayor en 8.8 por ciento a la de 2015; en el año 2000, ocuparon el quinto lugar al significar el 3.4 por ciento del total de ingresos de la cuenta corriente, considerando dentro de ésta las exportaciones automotrices, seguidas de la Inversión Extranjera Directa (IED), exportaciones petroleras e ingresos por turismo.
Las ventas de crudo al exterior pasaron de ocupar el segundo lugar como receptoras de divisas en 2010 –con el 12% del total- al quinto lugar en 2016 con una contribución de 4.33 por ciento. En contraparte, las remesas escalaron del cuarto lugar en 2010 (con una participación de 6.15%) al segundo en 2016 (6.24%), rebasando el porcentaje de ingresos por turismo (que aportó 4.52%) y superando, incluso a la IED, cuya participación fue de 6.18 por ciento en 2016.
El comportamiento de las remesas está estrechamente vinculado a la actividad económica de los Estados Unidos, ya que de ahí proviene el 96 por ciento. Se estima que tienen una correlación cercana al 80 por ciento con la industria de la construcción estadounidense.
Además, el mayor flujo se observa en el mes de mayo relacionado con el “Día de las Madres”. En 2015, las remesas crecieron 21.9 por ciento en términos reales con bases en pesos de 2008, el mayor incremento desde 2003, resultado de la apreciación del dólar y manteniéndose en niveles similares durante 2016.
De acuerdo con información del Banco Mundial, México es la cuarta economía, en el ámbito internacional, receptora de remesas después de China, India y Filipinas. En el ámbito nacional su importancia radica en el hecho de que representan un ingreso significativo para los hogares mexicanos, sobre todo para los de bajos ingresos, pues les permite obtener un apoyo adicional para su sustento.