Ciudad de México a 02 de Mayo (AMPRYT/CÍRCULO DIGITAL).-El jefe del Departamento de Inmunología Clínica y Alergias del Hospital de Especialidades del IMSS en Jalisco, Carlos Torres Lozano, indicó que 80 por ciento de los casos asma es consecuencia de procesos alérgicos.
En un comunicado, explicó que, por un lado, está el factor genético, el cual provoca que la hiperreactividad del organismo a ciertos elementos, desde ambientales hasta alimenticios u objetos de uso persona, se herede de padres a hijos.
“Es muy probable que los nuevos miembros de las familias tengan el mismo tipo de alergia que sus antecesores e incluso desarrollen unas nuevas”, afirmó el especialista del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco.
Afirmó que una vez manifestada una alergia, “el paciente la tendrá siempre. Si tengo una mamá que estornuda mucho cuando inhala perfume o ropa de plástico, por ejemplo, es muy probable que yo herede eso. Lo recomendable es evitar el contacto con aquello que se lo causa e ingrese a un tratamiento hiposensibilizante”.
Torres Lozano destacó que los ácaros del polvo dentro del hogar y el polen, presente en espacios abiertos, son dos de los principales causantes de este problema de salud, aunque existen otros como plantas y pelo de ciertos animales (gatos, caballos, perros, etc.), químicos utilizados en telas o comidas procesadas.
Consideró que otro factor a considerar es el estado de salud general de las personas, porque algunas patologías aumentan la probabilidad de tener asma. En el caso del sobrepeso y la obesidad, aumentan al doble el riesgo de ser asmático.
De esta forma, dijo, una buena calidad de vida en donde haya tanto una alimentación balanceada como la práctica constante de ejercicio, es fundamental para prevenir la enfermedad cuando no es de origen genético y para mantenerla controlada cuando sí lo es.
Torres Lozano comentó que muchas veces la dificultad respiratoria que caracteriza al asma, luego de que en los pulmones se presente un proceso respiratorio, se manifiesta al realizar actividades físicas cotidianas como durante el acto sexual e incluso al hacer cosas tan sencillas como caminar o reírse.
Aunque no existe manera de curar el asma, el paciente sí puede tener una buena calidad de vida, con ayuda de antihistamínicos prescritos en Primer Nivel de Atención por el médico familiar, hasta tratamientos más complejos que ayudan al sistema inmunológico a reducir la “hiperreactividad” del organismo.