WASHINGTON, 29 de diciembre, (AGENCIAS / CÍRCULO DIGITAL).- Por Rubén Barrera. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció hoy nuevas sanciones contra Rusia en respuesta al hackeo conducido por el gobierno del presidente Vladimir Putin durante el pasado proceso electoral estadunidense.
Obama anticipó acciones adicionales “en los tiempos y lugares que determinemos”, luego que su gobierno declaró “persona non grata” a 35 agentes rusos y decretó el cierre de dos instalaciones del gobierno ruso en Estados Unidos.
“Estas acciones se deben a las reiteradas advertencias públicas y privadas que hemos emitido al gobierno ruso y son una respuesta necesaria y apropiada a los esfuerzos por dañar los intereses estadunidenses en violación de las normas internacionales de conducta establecidas”, dijo el mandatario.
Reiteró que estas actividades de robo de datos y divulgación “solo podrían haber sido dirigidas por los niveles más altos del gobierno ruso”, en lo que pareció ser una alusión a Putin, quien según la Agencia Central de Inteligencia (CIA) estuvo involucrado personalmente en algunas etapas de estos ataques.
El mandatario denunció que diplomáticos estadunidenses en Rusia han sufrido un nivel “inaceptable de hostigamiento” en Moscú por parte de los servicios de seguridad y la policía rusos durante el último año.
“Tales actividades tienen consecuencias. Hoy en día, he pedido una serie de acciones en respuesta”, dijo el presidente estadunidense a través de comunicado difundido por la Casa Blanca.
Bajo esta directriz, la administración Obama impuso sanciones a nueve entidades y personas.
Entre las entidades sancionadas figuran el Servicio Federal de Seguridad (FSB, por sus siglas en inglés), sustituto de la KGB, así como la Agencia de Inteligencia Central (GRU), y tres empresas que proporcionaron apoyo material a las operaciones cibernéticas del GRU.
Asimismo, cuatro oficiales del GRU fueron sancionados, a la vez que el Departamento del Tesoro designó a dos ciudadanos rusos como sujetos de sanciones por haber incurrido en acciones de apropiación indebida de dinero e información de ciudadanos estadunidenses.
El Departamento de Estado ordenó además el cierre de dos instalaciones del gobierno ruso en Maryland y Nueva York, que de acuerdo con autoridades estadunidenses fueron utilizadas por personal ruso para propósitos de inteligencia.
La dependencia declaró además “persona non grata” a 35 agentes de inteligencia rusos, con lo cual deberán abandonar el país en unas horas.
Además de estas acciones tanto el Departamento de Seguridad Interna (DHS) como la Oficina Federal de Investigación (FBI) divulgaron información técnica desclasificada sobre la actividad cibernética del servicio de inteligencia civil y militar ruso.
Ello con el objetivo de ayudar a los defensores de redes en Estados Unidos y en el extranjero a detectar y responder a estas acciones.
Obama precisó que estas acciones no son la suma total de la respuesta de su gobierno frente a las “actividades agresivas de Rusia”.
“Continuaremos tomando una variedad de acciones en un momento y lugar de nuestra elección, algunas de las cuales no serán publicadas”, precisó.
Un informe de la CIA concluyó hace unas semanas que Rusia intervino en las elecciones del pasado 8 de noviembre para ayudar a Donald Trump a ganar la Presidencia, sobre Hillary Clinton, aunque la primera voz de alerta se hizo pública desde octubre pasado.
Entre las entidades e individuos que fueron blanco de este ‘hackeo’ figuraron el Comité Nacional Demócrata (NDC) y John Podesta, quien a la postre era el presidente de la campaña presidencial de Clinton.
Trump calificó como “ridículas” las afirmaciones de la comunidad de inteligencia e hizo notar que no fueron unánimes. Poco después cuestionó la supuesta decisión de la Casa Blanca de denunciar el hackeo hasta después de las elecciones.
El mandatario dijo que además de responsabilizar a Rusia por estas acciones, Estados Unidos sus amigos y aliados deben trabajar juntos para oponerse y responder a los esfuerzos de Rusia “para socavar las normas internacionales de conducta establecidas e interferir con la gobernabilidad democrática”.
Adelantó que en los próximos días su administración presentará al Congreso un informe “sobre los esfuerzos de Rusia por interferir en nuestras elecciones, así como por actividades cibernéticas maliciosas relacionadas con nuestro ciclo electoral en elecciones anteriores”.