Argel, un junior de la ‘cuatrote’, a la Secretaría de Cultura CDMX
Glorieta de Colón
Este lunes, Martí Batres, jefe de Gobierno, designó a Argel Gómez Concheiro como encargado de la Secretaría de Cultura de la capital del país. En la dependencia están que trinan los verdaderos expertos en la materia, porque aseguran que Argel Gómez no llega al cargo por méritos propios, pues su bisne son los conciertos. En realidad llegó ahí más porque es un junior de la “cuatrote”, pues es hijo de Pablo Gómez Álvarez, director de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIC), y de Elvira Concheiro, tesorera de la Federación. Buen amarre político de Batres, porque además nos cuentan que la intención es que Brugada ratifique al junior como secretario de la dependencia, a partir del 5 de octubre.
‘Malicia efectiva’ de Salvador Guerrero
Por más que el presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y la Justicia, Salvador Guerrero diga que actuó a título personal durante la campaña de Clara Brugada, no se podía quitar el cargo de presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y la Justicia cuando andaba en el papelón de matraquero en los mítines de la candidata de Morena. Además, en sus artículos de opinión que eran propaganda política para Clara Brugada, firmaba precisamente como titular de esa organización ciudadana, –que por cierto sí recibe recursos públicos–. Esto es “malicia efectiva” porque él sabía que se trataba de una aportación a la campaña oficialista de Brugada, con cargo al Consejo, y aun así lo hizo durante muchos meses.
Golpismo desde la Fiscalía
Como les dijimos ayer en este espacio, Ulises Lara ‘El Bailador’ insiste en hacerle un favor a Ricardo Monreal y quiere tumbar a la alcaldesa electa en la Cuauhtémoc, la opositora Alessandra Rojo de la Vega, utilizando a la Fiscalía General de Justicia para dar un golpe a la voluntad popular. Ahora presionan a mujeres que apoyó el colectivo “No es Una Somos Todas”, de Rojo de la Vega, para que declaren en su contra porque supuestamente no logró que les hicieran justicia, cuando en realidad la responsabilidad es de la Fiscalía. Que burdo.
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