CIUDAD DE MÉXICO, 06 de diciembre, (POLITIQUERÍAS / CÍRCULO DIGITAL).- Con 34 votos a favor y 21 abstenciones, la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) aprobó la abrogación de la Ley de Vivienda del Distrito Federal para expedir la nueva Ley de Vivienda de la Ciudad de México.
La legisladora local Dunia Ludlow Deloya expresó en tribuna que la nueva legislación fortalece el derecho a una vivienda digna y adecuada, lo que obliga a las autoridades correspondientes a promover lugares de ese tipo con mejores características.
La presidenta de la Comisión de Vivienda de la ALDF comentó que el propósito de la ley es incentivar la vivienda con la finalidad de que en la medida de que haya más oferta se reduzca el alto costo que actualmente tiene una casa o departamento, e incluso para rentar.
También busca generar esquemas de vivienda asequible y accesible a las diferentes necesidades de los adultos mayores, personas con discapacidad, jóvenes, jefas y jefes de familia y trabajadores, pues establece un tope máximo de vivienda popular de 750 mil pesos.
Además fija los mecanismos para ampliar los derechos de los ciudadanos, alentar la inversión y la actividad productiva.
Esa propuesta considera cinco ejes rectores: derechos humanos e igualdad de género, política integral, vivienda en todas sus modalidades, desarrollo urbano y movilidad, así como financiamiento.
Se incorporan mecanismos como el Consejo de Vivienda, la creación de una bolsa de suelo, nuevos esquemas de financiamiento y participación social a fin de incentivar y diversificar también la oferta de vivienda de interés social.
Con ello se busca fomentar la congruencia de las acciones de vivienda con los planes y programas de ordenamiento territorial, ecológico, protección civil, desarrollo urbano y movilidad.
Dunia Ludlow expuso que cada año 80 mil capitalinos demandan alguna opción de vivienda en la ciudad, que va desde mejoramiento hasta la adquisición de casa o departamento.
Al no tener acceso por el alto costo del suelo en la capital del país muchos de esos demandantes o viven hacinados en una misma casa o tienen que buscar alternativas en la periferia o los municipios conurbados del Estado de México.
La nueva ley consta de 118 artículos y prevé una bolsa de suelo que plantea utilizar todos aquellos terrenos o lotes abandonados o subutilizados para construir vivienda.
En delegaciones centrales como Cuauhtémoc, Benito Juárez y Miguel Hidalgo se contabilizan unos 80 mil terrenos subutilizados, ante lo cual la ley propone impulsar desarrollos de vivienda cerca de centros laborales y servicios públicos.
Se aplicarán sanciones a desarrolladores inmobiliarios que infrinjan la ley, como perder la licencia y la negativa a acceder a los programas institucionales de la Seduvi y el Invi.
También se sancionará a funcionarios como los inspectores que incurran en actos de corrupción.
La normativa aprobada busca coadyuvar y trabajar en conjunto con las cooperativas que se dedican a la construcción de casas-habitación.
A decir de Ludlow Deloya “esa ley no tiene bandera política, sino que contó con el más alto consenso de parte de todas las fuerzas políticas de la Ciudad de México”.
Para ello cuenta con lineamientos para la coordinación y vigilancia entre las autoridades locales, federales, organismos políticos y administrativos de la ciudad de México y organizaciones sociales.