Automovilistas tendrán cuatro opciones de verificación vehicular a partir de julio
CIUDAD DE MÉXICO, 8 de junio, (CDMX / CÍRCULO DIGITAL).- Los dueños de casi 5.7 millones de vehículos que circulan en promedio en la megalópolis tendrán cuatro opciones para someter a verificación su unidad motora, a fin de garantizar que sus emisiones estén bajo la nueva norma ambiental.
El subsecretario de Planeación y Política Ambiental, Rodolfo Lacy Tamayo, explicó la nueva Norma Oficial Mexicana de Emergencia NOM-EM-167-SEMARNAT-2016, que tendrá vigencia seis meses a partir del 1 de julio.
La nueva normativa clasifica en tres grupos los automotores a verificar, según las distintas versiones de la NOM-042: sin catalizador, que son aquellos anteriores a 1994; con convertidor catalítico, que estuvieron en el mercado de 1994 a 2005, y con sistema OBD, que son aquellos en venta de 2006 a la fecha, indicó.
El funcionario de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) abundó que a partir de esa clasificación se determinaron tres vías de verificación, las cuales consisten en la estática, la inspección por OBD y la dinámica, que actualmente se practica en todos los verificentros.
La nueva regla se apoyará por primera vez en el Sistema de Diagnóstico a Bordo (OBD, por su sigla en inglés), el cual monitorea hasta 11 subsistemas relacionados con el control de gases contaminantes provenientes del tren motor del vehículo.
Este sistema de diagnóstico está en 64 por ciento de la flota vehicular que transita por la megalópolis, lo cual permitirá hacer una prueba más confiable que la tradicional dinámica, ya que permite una inspección integral de la unidad durante seis meses a partir de su última verificación.
En ese sentido el subsecretario expuso que una de las bondades del nuevo sistema es que puede ser monitoreado por el propietario del vehículo, con una aplicación para teléfonos inteligentes o tabletas.
Es decir, podrá hacer un análisis inalámbrico de los cinco sistemas que se verificarán “de cajón” bajo la nueva norma: fallo de combustión, combustible, componentes integrales, sensores de oxígeno y convertidor catalítico.
A partir de ello el propietario puede respaldar que su vehículo responde a la nueva normatividad y hacerse acreedor al engomado “cero” (0) y en caso de que falle algunos de estos sistemas, puede llevar su vehículo al taller para su oportuna reparación o mantenimiento.
Esto es gracias al conector SAE J1962, que está incluido en la parte baja del tablero de los automotores y al cual se puede acceder por tecnología bluetooth (para sistemas IOS y Android) o por conexión alámbrica, en el caso de los verificentros.
En el caso de los vehículos que tienen convertidor catalítico y que deberá ser reemplazado, están todos los modelos de 1994 a 2005 y que corresponden a 22 por ciento del parque vehicular que transita por la megalópolis, es decir 1.2 millones de automotores.
No todos esos vehículos tienen OBD, pues este dispositivo comenzó a instalarse a partir de 2000 de manera voluntaria y en 2006 se hizo de forma obligatoria, recordó el funcionario.
Por ello los automotores que no cuenten con OBD serán sometidos a la tradicional prueba dinámica, que consiste en colocar el automotor en los rodillos para medir sus emisiones en velocidades baja y crucero.
En cuanto a las unidades que por sus características motrices no tengan convertidor catalítico y cuyo sistema de combustión es por carburador, podrán ser verificados con una prueba estática.
En este caso los automotores permanecen detenidos con el motor encendido y se miden sus emisiones de gases contaminantes a partir de la aceleración del motor; será aplicado a todos aquellos anteriores a 1994, que representan 14 por ciento de los vehículos de la megalópolis, es decir 760 mil.
Los que tienen combustión de diésel serán revisados con un método de opacidad, sin importar su año, modelo o peso bruto, y consistirá en la inspección del espectro de las emisiones que genera.
Por ello, explicó Lacy Tamayo, a partir de las emisiones que genere el vehículo y no de la antigüedad del vehículo será que se proporcione el holograma «cero» (0), «uno» (1) o «dos» (2).
Esto servirá de incentivo para que los propietarios de automotores den el mantenimiento adecuado a sus vehículos, a fin de acceder a un holograma «cero» por sus bajas emisiones, en beneficio del medio ambiente.