Aves silvestres, entre la vida y el comercio inlegal: PVEM
Ciudad de México a 9 de septiembre ( CÍRCULO DIGITAL).-La fracción parlamentaria del PVEM impulsa cambios a la Ley General de Vida Silvestre con la finalidad de prohibir la importación, exportación y reexportación de cualquier ejemplar de ave silvestre.
La iniciativa se encuentra en la Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales para su análisis, y propone adicionar el artículo 60 Bis 3 a la citada ley, para establecer que ningún ejemplar de ave silvestre, cuya distribución natural sea dentro del territorio nacional, podrá ser sujeto de aprovechamiento extractivo con fines comerciales.
Cita que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales solo podrá otorgar autorizaciones de aprovechamiento extractivo con fines de subsistencia, conservación o investigación científica. También señala que únicamente se otorgarán autorizaciones para investigación científica a instituciones académicas acreditadas.
El documento señala que la captura de aves silvestres para conservarlas como animales de compañía, es una actividad común desde tiempos prehispánicos. Estas aves resultan atractivas para el ser humano, motivo por el cual se les considera un bien de consumo en los mercados nacional e internacional.
El tráfico ilegal de vida silvestre comprende ejemplares vivos, así como productos y subproductos derivados de éstos, entendiendo que los productos son las partes no transformadas, mientras que los subproductos son aquellas que han sufrido algún proceso de transformación; puntualiza la iniciativa de los legisladores encabezados por Jesús Sesma Suárez.
Entre las especies más comercializadas ilegalmente en el país están el tucán pecho amarillo (Ramphastos sulfuratus), el mono araña (Ateles geoffroyi), el mono aullador (Aulluata palliata), la tarántula rodillas rojas (Brachypelma smithi), la iguana negra (Ctenosaura pectinata), la iguana verde (Iguana iguana), las víboras de cascabel (Crotalus sp) y el halcón de Harris (Parabuteo unicinctus), señala la propuesta.
Según la Interpol (Organización Internacional de Policía Criminal) y el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, México es considerado un país de origen y destino de ejemplares y productos de especies silvestres; se estima que entre 4 y 14 por ciento de las aves capturadas de manera ilegal tiene como destino final Estados Unidos. En Europa, España es considerado como el principal punto de entrada de las mismas.
Para regular estas capturas, indica el documento, el gobierno ha aplicado desde 1960 diferentes medidas y estrategias encaminadas a lograr un aprovechamiento sostenible de aves. Sin embargo, aún existe el comercio ilegal y sus conductas que atentan contra la conservación de la biodiversidad, por lo que es necesario evaluar la probabilidad de atender la prohibición a más especies silvestres con el fin de evitar pérdidas futuras que serán devastadoras para el patrimonio natural.