Con el TPP-11 se benefició México y se suspendieron: Ildefonso Guajardo
Ciudad de México a 14 de Febrero (FRANCISCO MONTAÑO/ AMPRYT/CÍRCULO DIGITAL).-Senadoras y senadores de la República sostuvieron una reunión de trabajo con el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal, para conocer los resultados de las negociaciones del pacto comercial trasnacional TPP-11 y cuáles son los alcances para los sectores productivos de México.
En su exposición inicial, Guajardo Villarreal aseguró que el TPP-11 refleja los mismos compromisos de acceso al mercado que se contenían en el Acuerdo de Asociación Transpacífico, aunque cambia el mecanismo de cláusula de entrada, suspende beneficios para Estados Unidos y aumenta la rentabilidad para el sector agroalimentario mexicano.
Indicó que con este instrumento, el sector agroalimentario de México tendrá acceso inmediato a los mercados de Australia en 99.9 por ciento, de Singapur en 100 por ciento, de Nueva Zelanda en 99 por ciento, de Brunéi en 98.7 por ciento y en Malasia será de 93 por ciento.
Para el mercado de Japón, nuestro país tendrá un acceso de 50 por ciento y en Vietnam de 42.6 por ciento. Dijo que estos accesos inmediatos serán para productos como berries, hortalizas, sandias, jarabe de agave, carne de res, de cerdo, tómate, productos avícolas, miel, aguacate, frutas tropicales, entre otros.
El funcionario precisó que en las negociaciones se protegieron a los sectores del arroz, azúcar, lácteos y a la industria textil; en estos dos últimos, informó, se han establecido agendas de trabajo. Además, agregó, se establecieron reglas para evitar el contrabando, los “negocios chuecos” de importación, y sobre todo, se frenó la desgravación del sector industrial.
Expresó que ahora será el Senado de la República quien lleve a cabo un diálogo con la sociedad mexicana y los actores productivos para analizar el TPP-11.
Mencionó que las economías que incluyen esta región han tenido una tasa de crecimiento significativa, y con el acuerdo, México abre seis nuevos mercados, lo que permitirá profundizar la estrategia de diversificación de comercio exterior de nuestro país.
Guajardo Villareal recordó que cuando Donald Trump sacó a Estados Unidos del acuerdo original era inviable materializarlo, pues una de sus cláusulas establecía que este instrumento no podía entrar en vigor, al menos que el número de países que lo aprobarán representarán el 85 por ciento del PIB de la región, por lo que en automático se hizo inviable el inicio de operación.
Dijo que ante la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, México y Canadá no mandarían señales de que los beneficios para Estados Unidos que se incluían en el TPP “iban a estar gratis”.
Les hicimos ver claramente a Japón que nuestro país sólo estaría dispuesto a negociar el nuevo acuerdo bajo tres premisas fundamentales: que se suspendan el conjunto de beneficios estratégicos para la Unión Americana, que no haya ningún retroceso al acceso de mercado y que no se aceptaría que ningún miembro diluya sus responsabilidades en materia de derechos laborales, ambientales, de desarrollo y de competitividad.