Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
En plena campaña interna por la presidencia del PAN, el michoacano anayista Marko Cortes no se guarda ya nada y en su análisis advierte que al final Carlos Castillo Peraza tuvo razón: por ganar el Gobierno los panistas perdieron el partido.
“Digámoslo con claridad: el Partido Acción Nacional, su mejor momento fue en el 2000, donde tuvimos el 42 por ciento de los votos; de 2000 a la fecha, 18 años de caída en las votaciones en el PAN…
“En el 2000, 42 por ciento; en el 2006, 36 por ciento; en el 2012, 25 por ciento; en el 2018, 22 por ciento, es una caída permanente en la votación, porque no se estuvo a la altura de las expectativas de la sociedad.
“El Gobierno que ofreció de cambio (el de Vicente Fox), el Gobierno que se ofreció de generación de empleos (el de Calderón), no estuvo a la altura de la sociedad y el Partido Acción Nacional debe reconocer que se pudo hacer más y no se hizo.
¿Cuáles eran los cambios Marko?
“Bueno, los cambios que en su momento ofreció Vicente Fox de sacar al PRI de Los Pinos y, efectivamente, lo sacamos, pero nos faltó en ese momento, sacar al PRI de todas las estructuras de Gobierno, esos son los temas que faltaron. No logramos sacar el quiste de lo que significaba el PRI en todos estos gobiernos, siguieron operando, siguieron fortaleciéndose y siguieron, por lo tanto, muchas mañas del viejo sistema.
“Por eso, Acción Nacional sí debe darse una sacudida de muchas de las prácticas que no funcionan, debemos retomar la ideología de la dignidad de la persona, del bien común, de la solidaridad, de la subsidiariedad.
“Debemos retomar causas y banderas que hicieron al PAN llegar a la Presidencia de la República y debemos estar listos para recibir a millones de mexicanos que en breve estarán desencantados por el desempeño del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador”.
¿El PAN con Calderón y Fox, se acercó al PRI, llegó Elba Esther y le entregaron una parte del poder?
“Yo estoy convencido de que se pudo hacer mucho más y, por eso, es que la sociedad decidió no votar ahora por el proyecto de Acción Nacional porque ya había tenido dos oportunidades, por supuesto, no votar por el proyecto del PRI, porque decepcionó a propios y extraños y decidió la mayoría de los mexicanos votar por un proyecto que llevaba 18 años intentándolo.
“Por ello es que nosotros debemos entender la nueva realidad de México.
“Llega un Presidente con mucha legitimidad, llega un Presidente con mayoría en las Cámaras, llega un Presidente con mayoría en 20 Congresos locales, llega un Presidente con anuncios con visos populistas y Acción Nacional como fuerza de oposición tiene que estar preparado, sólido, fuerte, para poder contener cambios que le pueden afectar a México, sus instituciones, la democracia o el equilibrio de poderes; pero también tenemos que estar listos para generar una propuesta y oferta que vuelva a enamorar y a convencer a millones de mexicanos, ese es el reto de Acción Nacional y, por eso, busco la Presidencia del Partido”.
Marko Cortes hace su autocrítica y recuento luego de que ayer entregó en San Lázaro oficinas y activos, propuestas y pendientes al senador y diputado electo Juan Carlos Romero Hicks, quien será coordinador de los nuevos diputados federales del PAN.
Considerado como el ariete del anayismo para que el excandidato presidencial perdedor, Ricardo Anaya continúe en el control de Acción Nacional y sus fracciones legislativas, Cortes advierte que sí, que es amigo de Anaya y que nunca lo va a negar.
Del surgimiento de un bloque de 9 gobernadores panistas que postulan y promueven al senador Héctor Larios y al exgobernador de Puebla Rafael Moreno Valle para que ocupen la presidencia y la secretaría general del PAN, Marko advierte que ese movimiento le favorece porque los militantes panistas repudian de siempre las imposiciones desde el poder.
“Yo te diría que a los militantes no les gusta que se dé el apoyo desde el poder gubernamental. Es algo que no ha gustado históricamente en el Partido Acción Nacional, te pongo ejemplos: Vicente Fox veía con muy buenos ojos a Santiago Creel; Felipe Calderón veía con excelentes ojos a Ernesto Cordero y así tenemos múltiples ejemplos en muchos lugares del país.
“En el partido somos oposición, rebeldes por naturaleza, nos formamos en la oposición y creemos en esos ideales y hoy México, más que nunca, obliga a que tengamos un Partido Acción Nacional que entienda la sana distancia que debe de haber entre el partido y el Gobierno, para ser una verdadera oposición que le sirva a México, que tienda puentes, que dialogue, que construya, pero que no se desdibuje como oposición.
“Por eso debe haber una sana distancia, entre el partido y el propio Gobierno, para poder ser una fuerte oposición y debe haber también todo el diálogo y todo el apoyo a nuestros gobiernos para que puedan hacer su función y puedan cumplir la expectativa de los ciudadanos”.
Por lo demás afirma que quien sala electo presidente del PAN lo hará con los votos de los 280 mil militantes inscritos en el padrón panista y no con los apoyos de los gobernadores.
“Yo sólo estoy en espera de que se emita la convocatoria para iniciar en el proceso de recaudar las firmas, de buscar los apoyos de los militantes.
“Se necesita al menos el diez por ciento del padrón. Unas 28 mil. Yo estoy seguro que tendremos mucho más de ese porcentaje y estamos listos, puestos, preparados, para ir a dirigir al Partido Acción Nacional en una lógica de buscar el reencuentro, de buscar el cómo sumamos, cómo nos integramos, cómo nos hacemos todos necesarios en un PAN que deben caber todos.
“Yo lo digo con total convicción: el Partido Acción Nacional debe estar a la altura de las nuevas circunstancias de México, un México que ya cambió, que tiene hegemonía el Gobierno Federal en ambas cámaras, un México que tiene visos autoritarios y que Acción Nacional debe convertirse en la alternativa de seria oposición, de congruente oposición y también, de ser ese contrapeso de poder que se requiere en México.
“… la contienda aún no inicia. Lo que yo les puedo decir es que traemos bastante respaldo de los militantes en todo México y de que no tengo duda de que vamos a ganar la dirigencia nacional del Partido, y que ganando la dirigencia nacional del partido yo haré todos los esfuerzos para buscar que tengamos un solo PAN. Una visión consensada con nuestros gobiernos, con nuestros municipios, con nuestros diputados, con nuestros senadores y con nuestras estructuras dentro del Partido Acción Nacional.
“El reto hoy es unificar al PAN y nosotros en Acción Nacional estamos listos para ir a una contienda. Yo confío que ésta sea de altura, que sea una contienda de propuestas, de solución de los retos que tenemos y de esa manera, que los panistas voten y de forma contundente decidan por un candidato.
“Son 18 años en los que el Partido Acción Nacional ha venido cayendo en su votación presidencial.
“Es necesario que se corrijan muchos temas del partido, de nuestra democracia interna, de la afiliación, de la forma de inclusión de las minorías.
“Es necesario que en el Partido Acción Nacional se reconozca que se esperaba más de nuestro nuestros gobiernos y que por eso también la sociedad decidió votar por otras opciones.
“Nadie puede negar que desde el 2000 a la fecha, en Acción Nacional hemos vivido una caída, elección presidencial tras elección presidencial y esto nos obliga a corregir y a que todos asumamos nuestra responsabilidad.
“Nuestra responsabilidad con base en las tareas que teníamos y por ello, es que tomé la decisión de ir a la dirigencia del Partido Acción Nacional porque conozco al PAN en sus entrañas, desde la formación juvenil hasta el Comité Ejecutivo Nacional, en los consejos estatales y el Consejo Nacional”.
En fin, un aspirante decidido a ganar.
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