Análisis a Fondo
Francisco Gómez Maza
· INAI, paga derecho de piso
· Acuña y Villanueva, complicidades
Cuando Francisco Acuña Llamas fue nombrado presidente del INAI, se comprometió a combatir la corrupción haciendo de la transparencia su bandera política.
Pero una cosa es el decir y otra cosa es el hacer. Hasta ahora Acuña no ha logrado pasar de las diatribas a los hechos.
En mayo del año pasado, Acuña fue elegido para presidir el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) para el periodo 2017-2020.
Como se sabe Acuña fue electo por el pleno del órgano de transparencia en una sesión pública de entre cuatro aspirantes al cargo: además de Acuña Llamas, los candidatos fueron la comisionada María Patricia Kurczyn Villalobos y los comisionados, Oscar Guerra Ford y Rosendoevgueni Monterrey Chepov, quienes expusieron su programa de trabajo en el que destacaron las acciones a implementar.
Hasta ahí todo parecía ir bien, pero Francisco Acuña pronto tuvo que pagar algunos favores a conspicuos personajes, como si se tratara de un chantaje como acostumbran los mafiosos cuando se cobra el “derecho de piso”.
Para decirlo de una manera más “elegante”, Acuña está pagando cuotas a los cuates. Eso significa que las amistades tienen precio.
Es en el caso de Francisco Javier Acuña quien, por apoyar a su amigo y padrino Ernesto Villanueva en el pasado, ahora tiene en la nómina a dos de sus personas directas que han cobrado desde el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM (una de estas personas es Juana de Jesús Santiago, quien tiene la encomienda de “reportar” la grilla interna en el INAI al investigador del IIJ, Ernesto Villanueva, quien la coló con la egresada del ITAM, ahora Abogada general de la UNAM, Mónica Gonzalez Contró.
Juana de Jesús Santiago está a cargo de la Subdirección de Integración y Cumplimiento con el Nivel MB2 con una remuneración neta de $52,280.43.
Otro “recomendado” –si se le puede llamar así– del doctor Ernesto Villanueva es José Mendiola Esquivel, quien es otro de sus “operadores” en el INAI. La percepción de Mendiola Esquivel es superior a la de Juana de Jesús Santiago.
Con recursos públicos del INAI, Javier Acuña está pagando favores a Ernesto Villanueva, el mismo que acusó al ex ministro Diego Valadés de ser el autor intelectual de un supuesto “atentado” en contra de Villanueva.
Javier Acuña es un rehén de Villanueva y tiene temor de que su amigo y exjefe Villanueva lo ataque en los medios donde publica sus mamotretos para “desprestigiarlo”, como lo hizo con las campañas mediáticas en contra de Perla Gómez Gallardo en la CDHDF, quien al parecer no accedió a darle su “moche”. Fue chantajeada por Villanueva, quien exigía “plazas” y cargos para sus cuates. Y no se diga de la socióloga Jacqueline Peshard, quien también fue chantajeada por Villanueva cuando ésta fungía como Comisionada Presidente del Instituto Federal de Acceso a la Información Pública en el periodo 2009 a 2013.
También es memorable el golpeteo al ex rector de la UNAM, José Narro, de quien Villanueva dijo primero que “no” tenía el título de doctor y luego le publicó un video, diciendo que había que protegerlo. Lo mismo hizo con el exgobernador Fausto Vallejo Figueroa e igual ha recurrido al golpeteo y el chantaje con el actual rector de la Universidad de Michoacán, Medardo Serna González y, el colmo, Villanueva se puso a piel blanca con Alejandra Barrales.
Qué opinión tendrán los otros comisionados del INAI, al saber que su presidente le pasa cuota y contrata cuates de Villanueva!
Claro, amor con amor se paga y Javier Acuña tendrá que transparentar también frente a sus amigos porque apoya a estas fichas de Ernesto Villanueva, al punto de dirigirle la tesis profesional a la becaria y asistente de investigación por muchos años de Ernesto.
Tiene razón Andrés Manuel López Obrador, quien ha demandado la refundación del INAI, empezando por la renuncia de su actual presidente, Javier Acuña.
Una joyita más de Villanueva: él fue quien asesoró a los asambleístas del PRD para que hicieran reformas a la ley que rige el INFODF para destituir a María Elena Pérez Jaén, quien denunció a Villanueva en un artículo periodístico.
Pérez Jaén denunció a Villanueva porque detectó que puso en la nómina del
Instituto de Transparencia, Acceso a la Información Pública, Protección de Datos Personales y Rendición de Cuentas de la Ciudad de México
(INFODF) a su primera esposa, que es filóloga y no correspondía con el perfil del cargo.
El PRD promovió, con las reformas, que los cargos de consejeros desaparecieran. Sin embargo, los comisionados del Instituto de Transparencia tienen derecho a permanecer en el cargo por seis años, sin derecho a reelección, además de no ser separados de sus cargos salvo que incurrieran en actos graves que afecten la institución.
Fue por eso que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) le dio la razón a Pérez Jaén, pues los ministros consideraron que las reformas a la Ley de Acceso a la Información Pública del DF, efectuada por los diputados de la Asamblea Legislativa el 27 de octubre del 2005, resultaron inconstitucionales. [email protected]
Francisco Gómez Maza