El Centro Histórico y sus establecimientos comerciales de 100 años y más
Ciudad de México a 07 de octubre (CDMX MAGACÍN).- Los edificios de las ciudades dan cuenta de sus cambios, no solo por las estructuras, sino por lo que habita en ellas y los establecimientos comerciales son testigos presenciales del paso del tiempo, tiendas emblemáticas como El Borcegui, Sombreros Tardan y El Nuevo Mundo han sido partícipes de los movimientos de la metrópoli.
Esas son tiendas con alrededor de los 100 años de edad y observan pacientemente los cambios sociales a través de la moda, algunas de ellas mantienen los mismos giros de hace un centenar de años y parecen soportar tanto los movimientos de la tierra como los cambiantes gustos de las personas.
El Centro Histórico es una buena oportunidad para observar la manera en que la capital mexicana se ha transformado; así, en la calle Venustiano Carranza, a la altura del Zócalo, está un edificio cuya construcción data de 1891, cuenta con cinco pisos con estructura de hierro fundido, característica que le dio el nombre de El Palacio de Hierro, el primer almacén en México que tomó como base las tiendas parisinas entonces de moda.
En la misma calle, pero con el número 92 está el edificio que data de 1936 y comercializaba importaciones del puerto de Liverpool, la construcción que lleva el mismo nombre fue una de las primeras tiendas departamentales de la ciudad; más adelante, en el número 109 permanece una de las tiendas más antiguas, la Mercería del Refugio, que abrió sus puertas en 1826.
El Nuevo Mundo, que data de 1910, también es uno de los comercios que han resistido los embates del tiempo, se sitúa en la calle Venustiano Carranza, pero con el número 72, y aunque en un principio se especializaba en la comercialización de telas hoy ofrece ropa y calzado, entre muchos otros artículos.
La Plaza de la Constitución ha visto el florecimiento de establecimientos emblemáticos como el Sombrero Tardan, que tiene 170 años en las cabezas de mexicanos y extranjeros, mientras que de los pies de numerosas generaciones se ha encargado El Borcegui, zapatería que opera desde 1865, la tienda de exteriores afrancesados que se ubica en la calle Bolívar número 27.
Otro establecimiento que ha resistido estoicamente el paso de los años es la librería Murgía, fundada en 1846 en la calle 16 de Septiembre número 54, y que destaca por un mural con representaciones de música, geografía, medicina e industria.
En la calle de República de Uruguay número 116 permanece un comercio emblemático, Herrajes Migliano, su fundador, Don Juan, llegó a México desde Italia en 1870, luego dejó el país para volver después de la Revolución Mexicana e instalar este negocio cuyo edificio fue demolido en 1926 y suplido por uno nuevo un año después, este comercio continúa operando por la tercera generación Migliano.
El Centro Histórico también alberga la única librería con títulos especializados en agricultura y su desarrollo; además, ahí se ofrecen semillas, fertilizantes e insecticidas, la tienda fue fundada en el siglo XVIII.
La Palestina es una talabartería centenaria que fue visitada por personajes como Emiliano Zapata y Francisco Villa, ubicada en la avenida 5 de Mayo, el establecimiento que cuenta ya con 120 años comercializaba artículos de piel para montar y cinturones, aunque en la actualidad ya cuenta con bolsas maletas y otros artículos de viaje.