El GCDMX tendría que actuar con más celeridad para evitar que la incertidumbre perturbe la calidad de vida de las familias afectadas por el sismo
Ciudad de México a 11 de octubre (CÍRCULO DIGITAL). -El Gobierno de la Ciudad de México tendría que actuar con mayor celeridad para impedir que la incertidumbre perturbe aún más la calidad de vida de las familias damnificadas, señaló la diputada Ana Juana Ángeles Valencia durante una reunión de trabajo que sostuvo con moradores de Unidades Habitacionales deterioradas por los efectos de los sismos del 7 y 19 de septiembre pasados.
Destacó que el burocratismo y la improvisada metodología para atender la gestión de riesgos, así como la carencia de una logística eficaz que permita la ayuda inmediata a los damnificados son componentes que podrían alterar la paz social.
Vecinos de las Unidades Habitacionales Politécnico San José Ticomán, ubicadas en calle Escuadrón 201, número 63 en la Colonia la Purísima; en Avenida Politécnico 2126 y con familias del inmueble ubicado en Calle 307, número 820, de la colonia Nueva Atzacoalco, todas en Gustavo A. Madero, al expresar su inconformidad destacaron que de no ser atendidas sus demandas de Certificación de Habitabilidad podrían tomar las calles para exigir los respectivos peritajes
En ese sentido, la legisladora argumentó que el Decreto del Jefe de gobierno de la Ciudad de México que instruye la elaboración de un programa y la creación de una “Comisión para la Reconstrucción, Recuperación y Transformación de la Ciudad de México en una CDMX cada vez más Resiliente” está lejos de proteger los derechos humanos a una vivienda decorosa y a una vida digna de los damnificados.
Expresó que la “Plataforma Integral CDMX”, herramienta en la que se concentrará la información de inmuebles, negocios y personas afectadas, para tener un control y hacer más eficiente la entrega de apoyos está lejos de ofrecer una ruta práctica que facilite una respuesta justa a los damnificados.
Se requiere, destacó, un Programa Integral de Reconstrucción y Atención a Damnificados desde un punto de vista social y no mercantil sustentado en una plataforma con fondos sólidos derivados de una redistribución del presupuesto, con recursos provenientes de los superávit no utilizados en los últimos dos años, y con recursos que no se han ejercido ni comprometido aún en este ejercicio fiscal.
Recordó que con base en el Estatuto de Gobierno, la Ley Orgánica de la Administración Pública, La Ley del Sistema de Protección Civil del Distrito Federal y su Reglamento, la función de la Secretaría de Protección Civil capitalina está a cargo del Sistema de Protección Civil del Distrito Federal, cuyo titular es el Jefe de Gobierno, así como el Jefe Delegacional en Gustavo A. Madero, en turno, quienes deben dar respuestas justas, efectivas y oportunas a todos los damnificados.
Refirió que el fin primordial del Sistema de Protección Civil es salvaguardar la vida, bienes y entorno de la población, así como mitigar los efectos destructivos que los fenómenos perturbadores pueden ocasionar a la estructura de los servicios vitales y los sistemas estratégicos de la Ciudad de México.
De igual manera precisó que el objetivo del Sistema de Protección Civil como lo refiere la ley en la materia, es salvaguardar a las personas ante la eventualidad de una emergencia o un desastre provocado por cualquiera de los fenómenos perturbadores a través de acciones que prevengan, reduzcan o eliminen la posibilidad de que la ocurrencia de los mismos genere una catástrofe.