Análisis a Fondo
Francisco Gómez Maza
· Los aranceles de la muerte
· México, mayor socio de EU
Con la imposición de aranceles a los productos mexicanos que ingresan a los mercados estadounidenses, el tozudo de Donald Trump se dará un balazo en el pie.
Su política comercial contra uno de los socios comerciales más importantes de los importadores gringos hará que se encarezca la vida de los estadounidenses quienes, para alimentarse de productos vegetales y animales, o para obtener manufacturas tienen que importarlas de México.
Los exportadores mexicanos no perderán, pues si el gobierno estadounidense les aumenta los impuestos, ellos aumentarán proporcionalmente los precios de sus exportaciones. Los primeros enojados con la política de Trump son los empresarios que importan productos agropecuarios, materias primas y productos manufacturados, como automotores.
Por el momento, de acuerdo con reportes periodísticos, la guerra comercial de Estados Unidos contra la República Popular de China colocó a México como el principal socio de los estadounidenses, según los reportes comerciales de enero y febrero pasados. El intercambio comercial México-EU ascendió a los 97,418 mdd. En ese mismo periodo, las importaciones y exportaciones de la nación asiática sumaron 90,366 mdd, 13% menos que en 2018.
En cambio, México avanzó 3.4%, con un monto de importaciones y exportaciones que representó el 15% del total de intercambio comercial de EU con el mundo. Las ventas mexicanas a Estados Unidos sumaron, en el periodo, 27,613 mdd, y casi la mitad de esas exportaciones (10,534 mdd) fueron venta de automotores y autopartes.
La balanza comercial produjo un superávit de 7,402 mdd, para México, la cifra histórica más alta para un febrero. Con todo, el superávit chino, en su relación comercial con EU, sigue superando con creces al de México. Su saldo a favor es de 59,200 mdd.
Pero México también le vende a Estados Unidos bóilers, maquinaria y partes; maquinaria eléctrica, de sonido, tv y partes; instrumental médico, quirúrgico, óptico y de fotografía. El petróleo, combustible y mineral, sólo ocupan la quinta posición con exportaciones por 2,161 mdd. Muebles, ropa de cama, lámparas, verduras, frutas, plásticos y artículos de hierro son otros de los productos mexicanos presentes en los mercados gringos.
Así que Estados Unidos depende de manera importante de México y más ahora que está peleando con los chinos, que ya le comieron el mandado en muchos rubros de la economía y de la carrera de la tecnología y armamentista, junto con Rusia, que son las nuevas potencias mundiales, junto con, curiosamente, Turquía.
Desgraciadamente, existe el peligro de que Trump sea reelegido por los votantes de la derecha y la extrema derecha estadounidense, entre los cuales están muchos ciudadanos de origen mexicano que ven con muy buenos ojos las políticas fascistoides del millonario neoyorquino, como su odio racial en contra de los prietos que, por necesidad o ignorancia, buscan una oportunidad de empleo en el mercado laboral del país del norte.
Hay quienes creen, y este escribidor es uno de ellos, que el gigante estadounidense está en los estertores de la muerte y, equivocadamente, con las políticas proteccionistas, el racismo, el exclusivismo, se niega a no seguir siendo la primera potencia mundial y no se da cuenta, el mandatario, de que su política económica, comercial, migratoria le va a significar, aunque repita otros cuatro años en la presidencia, un mayor deterioro a la nación, que tendrá que ceder el paso a las nuevas potencias: Rusia, China, Turquía.
El presidente de México, sinceramente, está equivocado al no reaccionar con vigor ante el anuncio agresivo de Trump. Tendría que ser más reactivo en defensa de la soberanía nacional frente a un imperio que históricamente ha tenido a México como su patio trasero. [email protected]