Opinión
BLAS A. BUENDÍA
· La Guardia Nacional y el incremento de la actividad delictiva es incuestionable, incluso las ejecuciones recorren nuestro territorio, alerta
· El panorama actual es en gran parte, resultado de acciones fallidas del pasado
· Vivir en un país pacífico y seguro es deseo de todos los mexicanos
Proporcionar seguridad a los habitantes del país es quizá la labor más importante del Estado, el que a fin garantizar realmente los derechos y libertades individuales, debe ser capaz de crear las condiciones para que todos los ciudadanos desarrollemos nuestras actividades diarias: transportarnos, trabajar, atender nuestros negocios, crear empleos, llevar sustento a nuestras familias, incluso estudiar o tener alguna recreación, que cada vez son más difícil realizar sin que sintamos temor a ser víctimas de algún delito.
Son las consideraciones del Magistrado civilista Élfego Bautista Pardo, quien en su análisis Así es el Derecho, destaca una serie de observaciones y el interés que el Estado mexicano ha planeado para instituir la Guardia Nacional.
El sentimiento de inseguridad –apuntó- está constantemente en aumento, y tiene bases sólidas, toda vez que el incremento de la actividad delictiva es incuestionable, incluso las ejecuciones recorren nuestro territorio: el 4 de marzo en Tabasco y Veracruz, el 3 en Casas Grandes, el 2 en Cancún, sumadas las narco-mantas, algunas de las cuales tenían amenazas en contra del presidente Andrés Manuel López Obrador, aunque es el mandatario con mayor legitimidad en la historia moderna del país, y así día tras día podríamos mencionar tragedias, como sucede desde sexenios anteriores; el panorama actual es en gran parte, resultado de acciones fallidas del pasado.
El Magistrado Bautista Pardo, oriundo del estado de Hidalgo, señala igualmente que independientemente de la causa de ese escenario, el 2019 tuvo comienzo violento: tan sólo en enero el Sistema Nacional de Seguridad Pública contabilizó al menos dos mil 853 víctimas de homicidio doloso.
Es por esto –señala- que la seguridad es una de las más grandes demandas a la Cuarta Transformación y, si ahora no se consigue, lo será para todas las administraciones posteriores, por lo que resulta necesario presenciar la toma de decisiones y las acciones dirigidas para abatir este mal endémico.
“Advertimos que la creación de la nueva Guardia Nacional es uno de los primeros mecanismos que servirán a la nueva administración federal para el combate a la delincuencia a fin de pacificar a todo el país, e independientemente de las críticas y el debate generado en su entorno, esperamos que su implementación sea exitosa y nos permita ver resultados positivos”, dijo el estudioso en materia de Derecho.
Asimismo, consideró que la tarea es difícil, pero exhortó a todos los mexicanos seguir trabajando para llevarla al cabo, pues vivir en un país pacífico y seguro es deseo de todos los mexicanos.
El dictamen que dará vida a la Guardia Nacional fue aprobado en la Cámara de Senadores el pasado 21 de febrero mediante reforma a los artículos 10, 16, 21, 31, 35, 36, 73, 76 y 89 constitucionales, y su punto medular es la creación de esa institución, nueva en materia seguridad pública, y la creación del Sistema Nacional de Información de Seguridad Pública a cargo de la Federación, las entidades federativas y los municipios, a través de las dependencias responsables de la seguridad pública, proporcionarán la información de que dispongan.
Destacó: “La Guardia Nacional será una institución policial de carácter civil adscrita a la Secretaría Seguridad Pública y colaborará con las entidades federativas y municipios para salvaguardar la vida, las libertades, la integridad y el patrimonio de las personas, así como contribuir a la generación y preservación del orden público y la paz social, de conformidad con lo previsto en la Constitución y las leyes en la materia. La formación y el desempeño de sus integrantes se regirán por una doctrina policial fundada en el servicio a la sociedad, la disciplina, el respeto a los derechos humanos, al imperio de la ley, al mando superior y, en lo conducente, a la perspectiva de género”.
Y puntualiza: “Su estructura orgánica y de dirección, así como las bases de la coordinación con las demás instituciones de seguridad pública y los otros niveles de gobierno, serán reguladas por las leyes que deberá expedir el Congreso de la Unión dentro de los 60 días naturales posteriores a la entrada en vigor del decreto, y para que esto suceda debe de ser aprobado por la mayoría de las legislaturas locales”.
“Así es el Derecho”, concluyó el Magistrado Élfego Bautista Pardo, titular de la Quinta Sala Civil del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México.