Es un momento difícil, pero no he dejado de entrenar: Kika
Ciudad de México, 26 de Septiembre (CÍRCULO DIGITAL).-Estos días son difíciles para el espectáculo o actos deportivos tras el terremoto del 19 de septiembre. Yéssica Kika Chávez lo apunta con cierto pesar. Este sábado tiene una cita para disputar el cinturón mosca del Consejo Mundial de Boxeo ante Esmeralda Moreno. Una cita para la cual ambas se eliminaron en un minitorneo organizado por el organismo.
La gente está desanimada
, reconoce Kika; es un momento difícil para un acto deportivo, pero la fecha no se ha movido y nosotras nos preparamos durante meses para este combate. Tenemos dolor, aunque no sufrimos daños directos, pero la vida continúa
.
Kika admite que los primeros días estuvo muy conmovida, pero su compromiso profesional no le permitió distraerse.
Mi hermana estuvo de voluntaria y la apoyé, pero yo tengo en mente que debemos pelear el próximo sábado y no he dejado de trabajar ni un día
, comenta; no puedo permitirme caer
.
Ambas peleadoras tienen la mirada puesta en el cinturón que premiará a la mejor boxeadora de la división, después de que se eliminaron y quedaron en el camino peleadoras recias como Ibeth Zamora y Ana Arrazola.
Hemos trabajado de manera ardua
, explica; estamos luchando por una meta que ha sido nuestro sueño desde que empezamos en este oficio
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Kika expuso hace unas semanas que este combate, a realizarse en Ecatepec, además representa la versión más genuina de lo que pretenden ambas. Lo afirma porque los sueldos que recibirán serán bajos para el esfuerzo que representa una preparación de meses.
En esa ocasión, se unió a Esmeralda para hacer públicas las condiciones que padecen las mujeres en este deporte.
En aquella reunión contaron que recibirían alrededor de cien mil pesos de sueldo, cantidad que se adelgaza al compartirlo con entrenador y equipo de trabajo. Si a eso se le resta también los insumos que requiere para la preparación, la suma final es insuficiente.
Esto que hago es lo que más amo y trabajo cada día para obtenerlo
, afirma Kika; el sábado es la culminación de todo lo que he trabajado. Incluso en estos días difíciles, hasta mi mamá me anima para que vaya al gimnasio para hacer mi entrenamiento normal. Estamos en pie y la vida sigue
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Con Información de la LaJornada