FAO pide 8.3 millones de dólares para refugiados rohingya
Ciudad de México a 04 de Mayo (AMPRYT/CÍRCULO DIGITAL).-La FAO llamó hoy a la comunidad internacional a reunir 8.3 millones de dólares para apoyar a los refugiados rohingya y a las comunidades de acogida, cerca de 1.2 millones de personas, en Bangladesh, ya que la temporada de ciclones y lluvias monzónicas los pone en un riesgo mayor.
La magnitud de la crisis de refugiados, cerca de 900 mil, más del doble de la población local de Cox’s Bazar, ejerce una gran presión sobre las comunidades de acogida, ya que la población compite por los ya escasos recursos naturales, alimentos, combustible y trabajo, advirtió la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en un comunicado.
Indicó que la creciente necesidad de talar los bosques para obtener leña, agota los recursos ambientales, lo que intensifica el riesgo de peligrosos deslizamientos de tierra e inundaciones repentinas durante la temporada de monzones de este año.
“La FAO está muy preocupada, porque si no invertimos ahora en esfuerzos de recuperación ambiental, esta situación puede tener consecuencias a corto y largo plazo, y sólo hará empeorar una tragedia humana que ya resulta devastadora”, advirtió el coordinador de Emergencias de la FAO en Bangladesh, Peter Agnew.
“Vemos cómo los precios de los alimentos suben y los sueldos diarios bajan, de seis a dos dólares, y una fuerte competencia por la leña y los alimentos. Los miembros de la comunidad anfitriona nos dicen que esta situación crea gran tensión en sus familias. Sencillamente, no hay suficiente trabajo y recursos para todos», dijo.
Es necesario crear oportunidades para que las personas reconstruyan sus medios de subsistencia y se alivien las crecientes tensiones sociales, señaló.
La FAO solicita 8.3 millones de dólares para proteger y restaurar los medios de subsistencia de las poblaciones vulnerables, mitigar la tensión social y llevar a cabo actividades de recuperación ambiental y producción agrícola a más largo plazo.
Hasta la fecha, la FAO solo ha recibido 1.5 millones del total de 9.8 millones que requiere de manera urgente para 2018.
Los fondos permitirán crear viveros y rehabilitar áreas forestales degradadas y evitar así una mayor degradación ambiental y restablecer la base de recursos naturales.
Además para proporcionar oportunidades de empleo a las comunidades de acogida en actividades de rehabilitación ambiental; continuar apoyando a estas comunidades para incrementar su producción alimentaria, brindándoles capacitación, semillas y herramientas; y mejorar la nutrición de los refugiados y sus anfitriones.
La FAO está asociada con la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) para mejorar la situación tanto de los refugiados como de las comunidades de acogida.
A medida que estas comunidades aumenten su producción de alimentos, ello no sólo cubrirá sus propias necesidades, sino que les proporcionará ingresos adicionales, ya que pueden vender su excedente de producción, que será distribuido entre los refugiados.
Para ayudar a las comunidades a enfrentarse mejor a la temporada de ciclones y a las lluvias monzónicas, la FAO distribuye material para preservar la inocuidad alimentaria, que incluye contenedores de almacenamiento resistentes al agua de 60 litros de capacidad, donde se pueden almacenar las reservas de alimentos, semillas y artículos valiosos, como documentos personales.
Este material también incluye herramientas, semillas y fertilizantes para que las familias puedan cultivar hortalizas y consumir alimentos de gran valor nutritivo.
La FAO se preocupa igualmente de la disponibilidad de alimentos a nivel comunitario.
En el primer trimestre de 2018, distribuyó semillas de calidad, bombas de agua de gran eficiencia y motocultores a grupos de campesinos entre las comunidades de acogida, para que no se pierda la cosecha de este año y puedan producir más alimentos.
La FAO proporcionó capacitación para mejorar la producción agrícola; facilitó el acceso a los mercados; y desarrolló la capacidad de los grupos de agricultores para producir y comercializar sus productos.