27 de April de 2024
Juego nuevo en el PRI
CirculoDigital Opinión

Juego nuevo en el PRI

Jul 12, 2016

Tras la Puerta del Poder

*Roberto Vizcaíno

– La llegada de Enrique Ochoa Reza abrió la caja de críticas de malos augurios
– El relevo es un mensaje a la vieja clase política: ‘ustedes tuvieron su oportunidad y fracasaron’
– ¿Por qué Videgaray tendría que darle su lugar a Meade en la carrera presidencial?
Con un abrazo solidario a mi amigo Héctor Gandini
Durante el pasado fin de semana las secciones políticas de todos los medios se llenaron con las más variadas versiones y comentarios, pronósticos y afirmaciones en las que se colocaba al ascenso del virtual nuevo presidente del PRI, el economista y doctor en Ciencia Política Enrique Ochoa Reza, como el preludio del hundimiento del PRI.
Viejos y nuevos columnistas hablaron del renacimiento de la cargada dentro del tricolor para señalar la designación de Ochoa Reza como una imposición a contrapelo de la voluntad mayoritaria de los tricolores.
Según estos el brutal rompimiento al interior del PRI ocurre porque se envía a un tecnócrata desconocido y desconocedor de ese instituto, como líder de este partido.
Para confirmar la ruptura, exhibieron un twit de Ulises Ruiz en el que el controvertido oaxaqueño critica la decisión de impulsar a Ochoa Reza como nuevo dirigente nacional de su partido.
Y otros más pronosticaron una rebelión interna de priistas inconformes, rebelión que llegaron incluso a comparar con la ruptura que significó la salida de Cuauhtémoc Cárdenas, Porfirio Muñoz Ledo e Ifigenia Martínez y 200 o 300 otros cuadros destacados del PRI en 1987-88.  
Total, que para no pocos la llegada de Ochoa Reza a la dirigencia nacional del PRI significa casi la puntilla para ese partido.
Otros reconocieron en ese nombramiento el cumplimiento de un primer paso dentro de un guion diseñado en la Secretaría de Hacienda por Luis Videgaray para apoderarse del Tricolor y lanzar en 2018 al titular de Sedesol José Antonio Meade como candidato del PRI a la Presidencia de la República. Esta versión recibió muchos likes y aplausos en redes sociales.
Claro, hay muchas más reacciones.
INCONFORMES
Yo sólo pregunto: ¿cargada, imposición… o el simple uso de un viejo y muy efectivo método aplicado dentro del PRI desde que fue creado por Plutarco Elías Calles en 1938? ¿En qué se diferencia la llegada y ascenso de Ochoa Reza de las de Manlio Fabio Beltrones hace 10 meses o de la de César Camacho Quiroz o de la de Humberto Moreira? Es básicamente lo mismo: líderes de sectores apoyando a un candidato único y cumpliendo con la voluntad del dueño real del partido, el huésped sexenal de Los Pinos.
¿Hay viejos priístas inconformes?, ¿en serio?, ¿y?
El mensaje de Enrique Peña Nieto es directo y claro: “ustedes, con Beltrones, tuvieron su oportunidad y fracasaron… ahora va otro equipo”.
El golpe de 7 del PAN por 5 del PRI es devastador: con estas derrotas el PRI dejó de gobernar en estados que cuentan con 19 millones de habitantes. Hoy gracias a ello la oposición PAN y PRD gobiernan a más de la mitad de todos los mexicanos.
Hay quienes afirman que Beltrones no fue el culpable de esas derrotas, sino los gobernadores que endeudaron al tope a sus estados y que están marcados como corruptos.
Pero hay otros que advierten que Beltrones tuvo la oportunidad de deslindarse, de decirle al presidente Peña Nieto que con esos gobernadores no jugaría. Y que tuvo la responsabilidad de deslindar al PRI incluso colocando su renuncia –como lo hizo en su momento Agustín Basave en el PRD-, en la mesa.
En lugar de eso dejó libres a César Duarte en Chihuahua; a Javier Duarte en Veracruz y a Roberto Borge en Quintana Roo.
EL FACTOR VIDEGARAY
El viernes pasado, al señalar que Ochoa Reza iba a la dirigencia nacional del PRI, dijimos aquí mismo desde la cabeza de esta columna que el nuevo dirigente era cercano a Luis Videgaray.
Pertenece al amplio grupo de jóvenes egresados de las más prestigiadas universidades internacionales, especialmente norteamericanas, aliado al titular de Hacienda.
Su llegada como suplente de Beltrones para cumplir el mandato de este hasta agosto de 2019 tiene una clara connotación en la cual no hay sorpresas: es un evidente cambio de juego hacia el uso de nuevas tecnologías y métodos en los procesos políticos y electorales de México.
Los viejos operadores políticos y la red de delegados surgidos del círculo de amistades del presidente del PRI, no funcionaron.
¿Ahora llega la tecnocracia?
No, eso se llama asumir la realidad en la disputa del Poder en el mundo actual. Seguro que Ochoa Reza, con el evidente consejo y apoyo de su grupo, acudirá a eso que se conoce ahora como Big-Data.
Menos encuestas que ya no sirven para nada y que sólo distorsionan la realidad, y más consultas a usuarios de redes sociales donde todos se expresan libremente en tiempo real.
Eso es lo que dominará en los siguientes procesos electorales y esos son los del Estado de México, Coahuila, Nayarit y las municipales en Veracruz, así como el proceso de 2018 en que se jugará la Presidencia de la república y la integración del Senado y la Cámara de Diputados.
Quien vea a Videgaray manipulando a Ochoa Reza para imponer a José Antonio Meade, el blandengue secretario de Desarrollo Social quizá se lleve un frentazo.
¿En Verdad hay quienes puedan creer que Videgaray o cualquier otro le puede imponer sucesor a Peña Nieto?, ¿Por qué tendría que hacerlo el titular de Hacienda?, ¿Por qué apoyar a Meade y dejarle el sitio que podría ser suyo?
Meade… ¿qué ha hecho Meade para que le den la candidatura del PRI a la Presidencia de la República?. ¿ser un hibrido panista-priista?, ¿en serio eso merece que lo hagan candidato del tricolor a la Presidencia?
Es obvio que en esta nueva etapa del juego por el Poder Videgaray y Peña Nieto van de la mano. No uno sobre el otro.
Y hay que destacar que Peña –quien se ha destacado por su pragmatismo y por su frialdad al tomar decisiones- ha abierto su baraja y tiene en la mesa a varios prospectos:
  • Está obviamente Luis Videgaray, quien ha bajado su perfil público, pero que no se ha salido de la carrera por Los Pinos.
  • Obviamente está Miguel Ángel Osorio Chong, quien puntea entre los priístas.
  • Está Meade.
  • Está Aurelio Nuño.
  • Y hay quienes ponen a Claudia Ruiz Massieu y hasta Ivonne Ortega.
    Vale la pena no descartar lo que dijo Peña a periodistas, que el candidato del PRI podría ser un político al que ahora sólo conoce el 1 por ciento de los mexicanos. Y también hay que dejar en claro que ganar la candidatura no significará el pase automático a Los Pinos.
    ¿RUPTURA O UNIDAD?
    Y, finalmente, hay quienes advierten que el PRI está a punto de la ruptura por la llegada de Ochoa Reza, como cuando Cárdena se salió, pues.
    ¿Quiénes son el Cárdenas y el Porfirio y la Ifigenia que ahora encabezarán la fractura de este PRI?, ¿Ulises Ruiz?, ¿Es broma?
    Bueno, yo tampoco veo a Manlio ausente en el acto en que Ochoa Reza asumirá mañana el poder en el PRI. Si de algo sabe Beltrones es de este juego. Y no es tampoco un rupturista. A sus años está lejos de ser un ingenuo.
    Bueno, por ahí me comentaron que a lo mejor y por primera vez se aparece Enrique Peña Nieto en ese Consejo Nacional. Para que no se hagan bolas.
    Quienes no le jugamos al Tío Lolo, sabemos que falta mucho para la designación del candidato presidencial priísta (y panista y perredista y…) de 2018, y que la situación de hoy será muy distinta a la de ese tiempo y que quien resulte nominado corresponderá a otros reclamos. Las condiciones de hoy no se pueden congelar. Así que en 2018 serán otros los escenarios. Y eso determinará qué tipo de candidatos y elecciones tendremos. Así que lo de hoy es apenas el cambio en la dirigencia de un partido.

 

@_RVizacino