CIUDAD DE MÉXICO, 27 de enero, (MENSAJE POLÍTICO/CÍRCULO DIGITAL).—El senador Miguel Barbosa Huerta, presidente del Comité Directivo del Instituto Belisario Domínguez, al encabezar la presentación del libro “Manuel Camacho Solís y la Transformación de México”, aseguró que el ex senador tenía una visión estratégica de la política.
Con él se hacía análisis de cada momento que estaba ocurriendo en la política nacional y, abundó, nunca fue opositor dentro del Grupo Parlamentario del PRD, sino un constructor.
Camacho Solís, apuntó, fue un permanente estratega de cada momento que se vive en el ámbito político, y “aprendí a poder aprovechar su talento, el valor de la eficacia en la vida y en la política”.
Estamos de plácemes, dijo, porque estamos recordando a una persona querida, estamos presentando su obra, que ayudará a perdurar la memoria de Manuel Camacho y de su rica y abundante vida.
A la presentación de la obra acudieron la señora Mónica Van der Vliet de Camacho; sus hijas, Isabel, Inés y Leonor; sus hijos, Manuel, Juan Salvador y Guadalupe Camacho Velasco; su hermano Rafael Camacho Solís y su hermana María de la Luz Camacho Solís, así como amigos y colaboradores.
En su participación, Leticia Bonifaz Alfonso, directora General de Estudios, Promoción y Desarrollo de los Derechos Humanos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), dijo que Camacho Solís era un hombre que sabía escuchar y siempre traía consigo, para algún problema, un Plan B, puesto que era un conocedor del sistema político mexicano.
Al respecto, Ignacio Marván Laborde, investigador del Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE), señaló que Camacho Solís tenía perspectivas de reformas para enfrentar una situación crítica, en la que primeramente se debía reconocer dicha situación para cambiar y resolver de fondo ese entorno.
Aseguró que el ex senador nunca fue un ingenuo, puesto que él abogaba por la reconstrucción del poder político para que tuviera capacidad de decisión y eficacia, puesto que sabía de qué se trataba y para qué servía el poder político.
Diego Valadés, del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, dijo que Manuel Camacho ya es un personaje histórico, una persona de alto nivel. Explicó que se puede hablar con él a través de la obra que se presenta, puesto que en ella se expresan las ideas, comentarios y trabajos del ex legislador.
Enfatizó que Camacho Solís fue un maestro insuperable en el arte de la negociación, pero que fue muy mal apreciado en su momento, toda vez que cuando el planteo la necesidad de la concertación de voluntades para la construcción de instituciones, se desfiguró su planteamiento, ya que se dijo que se trataba de una concertacesión.
Alejandra Moreno Toscano, Diputada a la Asamblea Constituyente, señaló que en política se actúa sobre la realidad de hoy. Sin embargo, identificar orígenes de los problemas y sus derroteros posibles permite imaginar soluciones a conflictos que pueden ser compartidos, concertadas y suscritas con otros actores políticos sin vaticinar, amenazar, dramatizar fracturas inminentes. Dijo que esa era la estrategia de su pensamiento.
Comentó que así era Camacho Solís, pues su forma de pensar y actuar le ayudaba a imaginar salida a los conflictos. Los peores escenarios nunca sucedieron, toda vez que, como buen político trabajó para que no sucedieran.
Cabe señalar que, en la tribuna de la Comisión Permanente, moderó el Coordinador Ejecutivo de Investigación del Instituto Belisario Domínguez, Gerardo Esquivel y participó Carlos Monroy Villalobos, asesor parlamentario.