Tras bambalinas
Jorge Octavio Ochoa
Marcelo Ebrard regresó impoluto a la política, cubierto por el manto de impunidad que le da el haberse cobijado con MORENA. Dijo que no se siente avergonzado de su gestión en el GDF, tras el escandaloso error cometido en la Línea 12, que ocasionó un daño millonario, ya no digamos al erario público… ¡A usted, sufrido lector! Ungido por la santidad que le da el ser aliado de “ya saben quién”, Marcelo Ebrard se dio el lujo de criticar a Miguel Angel Mancera (que de suyo es otro petardo) y dijo que éste “decidió jugar en el equipo de la derecha”. Ahora resulta que la cooptación clientelar es una avanzada de izquierda. Dice que arrebatar la ciudad al PRD será su principal tarea. ¡Que verguenza Don Marcelo Ebrard! Usted, al igual que Rosario Robles, son políticos impresentables para los chilangos. A Marcelo Ebrard se le olvidó también el linchamiento de dos policías federales en Tláhuac, que fueron quemados vivos mientras él dejaba que creciera el escándalo porque era “un asunto federal”. No quiso meter un dedo y los dejó masacrar. Algunos columnistas dicen que “no se le ha probado nada” a Don Marcelo respecto al desfalco en la Línea 12. ¿Se necesitan más pruebas de incapacidad que colocar rieles equivocados? Si usted, amable burócrata o asalariado, comete un error de cálculo que le cueste más de 100 mil pesos a su empresa o dependencia, júrelo que lo corren, lo inhabilitan o se va a la cárcel. Pero estos se perdonan todo. Saltan de un partido a otro evadiendo la ley, la justicia, que de por sí no andan muy prestas en México. Por esa razón, señor Marcelo, mejor quito su segundo apellido ¿Qué culpa tiene ella? Las elecciones del 2018 nos están revelando que los políticos tienen bien ganada la fama. Son corruptos, desleales pero, principalmente, farsantes, independientemente del nombre del partido. En algunos casos, posiblemente podría entenderse el brinco de partido en partido, sobre todo cuando se trata de una imposición, un acto de autoritarismo o una rebelión, Pero la mentira se descubre cuando detrás no hay principios ideológicos, sólo pragmatismo, estatus, posición, ambición y hambre de poder. El periódico REFORMA dio a conocer hace unos días la manera en que “cobró” Gabriela Cuevas la gracia de sumarse a las filas de MORENA. El PRI le había ofrecido una diputación en los primeros lugares del listado nacional; López Obrador le ofreció eso mismo y una representación internacional una vez que MORENA obtenga el triunfo. Ella, al igual que Ernesto Cordero, Javier Lozano y Roberto Gil, no sentía ninguna simpatía por Ricardo Anaya, al que siempre vieron como un impostor y un autoritario. La pregunta es si Andrés Manuel es menos autoritario que aquel. Además, el problema con ella es que, al igual que Anaya, adolece de lo mismo: SOBERBIA. Bajo esta óptica, tienen mucho sentido las reflexiones del periodista Daniel Moreno: “Habría que hacer un recuento detallado, pero hoy podemos decir que tres de los más cercanos colaboradores de Felipe Calderón están hoy muy lejos de él. 1.- Germán Martínez, quien fue presidente del PAN con Calderón y que como abogado presumía de ser el “nuevo Diego Fernández de Cevallos”, hoy le dedica su columna en Reforma a AMLO y es candidato del tabasqueño a fiscal general. 2. Alejandra Sota es una de las principales consultoras de José Antonio Meade ( y una de sus “medallas” es haber colaborado con Alfredo del Mazo) 3.- Max Cortázar trabajó para la precampañas de Rafael Moreno Valle. Ninguno está con Margarita Zavala”. Nosotros añadimos a la reflexión de Daniel Moreno: son traidores a sí mismos. Pero eso es lo de menos. Estos son los que hoy prometen que serán FERVIENTES servidores públicos. Así pues, las elecciones de este año, además de patéticas, rayan en el surrealismo. Sumado a las campañas negras, hoy se habla de una guerra sucia y se dice que haya intromisión internacional, desde Rusia y Venezuela. Según el periódico LA RAZÓN, el INE informó hace unos meses que el mayor número de accesos al portal oficial para votar desde el extranjero en las próximas elecciones, provienen de computadoras instaladas en San Petesburgo. La versión no ha sido desmentida ni aclarada por el INE, pero da igual. Ese instituto no genera confianza a nadie. Menos aún cuando el propio secretario de Estado de los Estados Unidos, Rex Tillerson dijo que “Todo lo que puedo decir es que nosotros sabemos que Rusia tiene tentáculos en diferentes elecciones en el mundo“. Así pues, serán unas elecciones pasadas por balas y dinero sucio. Ahí tenemos ya otro caso revelador, además de los escandalosos desvíos de dinero en Chihuahua, para el PRI. La PGR detuvo a Juan Vergara Fernández, ex secretario de Finanzas y Planeación del gobierno de Carlos Joaquin González y precandidato a diputado federal por el Distrito III de Cancún por la alianza que integran el PAN-PRD-MC. Vergara Fernández enfrenta una denuncia ante la Procuraduría General de la República (PGR) por peculado, enriquecimiento ilícito y lavado de dinero a través de la empresa Travel Channel. La acusación data de marzo del año pasado y concretamente se pide indagar contratos millonarios que supuestamente Vergara obtuvo con los Gobiernos de Rafael Moreno Valle (Puebla), Javier Duarte (Veracruz), Manuel Velasco (Chiapas), Rolando Zapata (Yucatán), Roberto Borge (Quintana Roo) y Fernando Toranzo (San Luis Potosí). ¿Pues no que Anaya muy salsa contra la corrupción? ¿No estaba enterado? ¡Valiente aspirante presidencial! Ricardito, eres un mentiroso.