CIUDAD DE MÉXICO, 24 de junio, (AGENCIAS / CÍRCULO DIGITAL).- Por Gloria Islas Rodríguez. La secretaria general del PRI, Claudia Ruiz Massieu, aseveró que no habrá «traje a la medida» para ningún «presidenciable» y calificó de natural que algunos priistas externen sus aspiraciones para el 2018, pues están en un partido abierto donde cada quien puede expresar su punto de vista.
Ruiz Massieu, quien coordina la XXII Asamblea Nacional de este instituto político, que en una primera etapa reunió a más de 230 mil priistas, ofreció que estos trabajos serán espacios abiertos al debate con transparencia y sin tabúes en ningún tema, incluido el método para la elección de candidatos para los comicios del próximo año.
«La mejor garantía que habrá piso parejo -para los aspirantes a la candidatura presidencial del PRI- es tener claridad de cómo se va a elegir a las candidatas y candidatos que nos van a representar en la próxima elección», indicó en entrevista la dirigente del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Por ello es importante que este debate sea transparente y abierto para que los priistas tengamos la certeza de hacia dónde vamos y cómo vamos. Esa es la mejor garantía de piso parejo, que no haya reglas distintas para cada uno, sino la misma, ni traje a la medida para nadie.
Reconoció que, como priista, la opinión del presidente Enrique Peña Nieto cuenta mucho en las decisiones que se tomen en su partido, pues es el primer priista del país, «es un cuadro distinguido en el partido y en ese sentido tiene un valor su opinión y estamos esperando contar con su presencia el día de la plenaria (de la Asamblea Nacional).
Sin embargo, Claudia Ruiz Massieu aclaró que la decisión de cómo elegir a los candidatos para el proceso electoral de 2018 es para lo que se está dando un gran debate en los trabajos de la Asamblea Nacional priista.
Del cónclave de la dirigencia priista con los gobernadores celebrada en la víspera, la excanciller aseguró que ésta fue positiva, porque todo mundo está con entusiasmo por la etapa importante que es la asamblea y que será definitorio en muchas cosas que ahí se decidan.
Reconoció que es una etapa más de mucha intensidad por la pluralidad de visiones que se expresan «y eso siempre es bueno».
El PRI llega a su XXII Asamblea con mucho ánimo por los triunfos electorales en el Estado de México y Coahuila, pero también con mucha claridad de que las victorias se dan en un contexto de elecciones en el país muy reñidas, en donde se ganan por diferencias en un dígito.
No obstante la dirigente partidista aclaró que el partido tricolor ganó el Estado de México por tres dígitos y Coahuila con más de dos dígitos, pero la realidad es que la pluralidad hace que las elecciones sea muy competitivas.
Afirmó que los priistas tienen que aprovechar su Asamblea en este contexto de gran competencia y de desilusión de muchos ciudadanos en el sistema de partidos para replantarnos cómo hacer política ¿Qué tipo de país queremos, cómo vamos enfrentar los retos y con qué estándar de conducta de nuestros servidores públicos y nuestros militantes?.
Advirtió que cualquier partido que quiera permanecer competitivo y que quiera tener la confianza de la ciudadanía como es el caso del PRI, tiene que hacer un ejercicio de autocrítica y de definición de futuro de los qué y cómo, «es lo que vamos hacer en la Asamblea».
Ruiz Massieu resaltó que los trabajos iniciaron en abril, en una primera etapa con asambleas municipales en donde participaron 230 mil priistas en todo el país, en donde se han debatido, analizado y contrastado propuestas y una de ellas es entorno a nuestro arreglo interno y de convivencia que tiene que ver con los estatutos.
Afirmó que la plenaria nacional a celebrarse el 12 de agosto que es la culminación de la Asamblea, se llevará en un marco de transparencia en donde para entonces cientos de miles de priistas ya habrán debatido y expresado en torno a los temas que le interesan a los mexicanos.
«Está es una oportunidad para nosotros, para abrirnos, desde luego escuchar los distintos puntos de vista que existan dentro de nuestro partido y abrirnos ha escuchar a la ciudadanía del país».
La secretaria general priista ofreció un ejercicio de política más abierto, cercano, transparente, sensible y de rendición de cuentas.
Sobre la posibilidad de abrir candados para eliminar los 10 años de militancia para las candidaturas, reconoció que hay quienes proponen eso y ser un partido abierto y competitivo y quién mejor reúna las características y pueda abanderar el programa.
Sin embargo, resaltó también hay quien dice que no e incluso que se debe incluir otro tipo de exigencias para nuestros candidatos. «Hay, la verdad, multiplicidad de opiniones, por eso habrá de ser uno de los temas que mayor interés concita, porque tiene que ver con la selección de candidatos.
Recordó que el próximo año se tendrá en México las elecciones más grandes que se hayan tenido, con la Presidencia de la República, la renovación del Congreso de la Unión, nueve gubernaturas y en 29 estados ayuntamientos y diputados locales.
Por ello, estimó que se deben tener métodos claros para la elección de candidatos en todos los niveles y por eso hay distintos puntos de vista de que poner o quitar.
Reiteró que no habrá ningún tema vedado, prohibido o tabú en la asamblea priista y afirmó que cómo coordinadora de la asamblea y secretaria general, al igual que el dirigente nacional, Enrique Ochoa Reza, apuesta por una asamblea abierta, deliberativa, crítica y autocrítica, pero sobre todo de propuestas.
Sobre el tema de cambiar el nombre al PRI, comentó que «ha sido una propuesta de hace ya algunos años, de algunos sectores del partido, yo en lo personal creo que los tiempos que estamos pegados al inicio del proceso electoral del año entrante estarían un poco justos.
«Sin duda más allá del nombre lo que los priistas estaríamos debatiendo es qué clase de partido queremos ser, cómo vamos a articular una oferta política que plasme nuestra visión de partido que queremos y que refleje las aspiraciones de la ciudadanía».
Afirmó que lo que le interesa a los mexicanos es saber qué vamos a proponer y cómo vamos a construir confianza ciudadana para llevar adelante los proyectos que planteen en la próxima campaña.
En ese sentido sostuvo que el Revolucionario Institucional quiere una alianza con la ciudadanía para el 2018, por eso la asamblea es una gran oportunidad para poder definir con toda claridad cuáles son las causas y la visión que queremos ofertar a los mexicanos.
No obstante, resaltó que desde luego las alianzas con otras fuerzas políticas son importantes y «estamos también trabajando en ello, pero es más poder articular una hoja de ruta seria que responda a las expectativas de los mexicanos».
Para ser competitivos el año que entra y siempre, tenemos que estar en un ejercicio permanente de renovación, debate y mejoramiento para estar más fuertes y responder mejor a lo que los mexicanos quieren.
Al ser cuestionada sobre si hay miedo ante las alianzas electorales de Morena, PRD y PAN, dejó claro que «de ninguna manera, les damos miedo nosotros, por eso se plantean desde ahora que solos no pueden ganar y tienen que unirse para poder competir con nosotros».
Más aún, advirtió que el PRI sabe bien que para ser competitivo y ganar tiene que tener buenos candidatos, por eso se debaten en la Asamblea los requisitos más allá de los normales de procedimientos, sino de conducta y de visión de servicio público que deben tener las mujeres y hombres que enarbolen nuestro proyecto.
El exlegisladora federal advirtió que se trabaja en la cohesión interna para tener un PRI fuerte, porque para 2018 se requiere propuesta, candidato y partido.
En cuanto a los priistas que han expresado sus aspiraciones para el proceso electoral de 2018, como el secretario de Turismo, Enrique de la Madrid, y la exdirigente priista, Ivonne Ortega, aseguró que es natural pues son un partido político, integrado por gente que ha hecho del servicio público una decisión de vida, «y tenemos cuadros verdaderamente formados, con experiencia, visión y es natural que tengan aspiraciones».
Afirmó que el hecho que lo hayan manifestado es una muestra más que es un partido abierto, en donde cada quien puede expresar su punto de vista y perseguir sus propias aspiraciones, «en ese sentido es algo muy positivo».
«Tenemos muchos cuadros, más de los que ahora se han expresado públicamente, que reúnen las cualidades, la experiencia, la trayectoria, la visión y la congruencia, el compromiso con el partido para poder abanderar al PRI en la próxima elección», resaltó.