Ofrece Marco Rascón una CDMX “de Iguales”

+Como candidato del Partido Humanista ofrece sanear formas de hacer política

+En su campaña prevalecerán propuestas y reivindicará una “ciudad de iguales”, justa y solidaria

+Que el bienestar común se traduzca mejor calidad de vida de las personas

CIUDAD DE MÉXICO, 1 DE abril (JESÚS YAÑEZ / MENSAJE POLÍTICO).- Marco Rascón, candidato del Partido Humanista a la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, ofreció hoy cambiar y sanear las formas de hacer política, “mediante una ciudad de iguales”.

Será, precisó, a través de una cultura en la que prevalezcan las propuestas y reivindiquen la justicia, la solidaridad y humanidad, en la que el bienestar común se traduzca en elevar la calidad de vida de las personas.

Frente a la crisis de representatividad política que prevalece en la Ciudad de México, se dijo listo también para librar la batalla por recuperar la identidad democrática secuestrada, dividida y tergiversada hace 18 años.

Al aseverar que la CDMX tiene futuro, propuso un campaña de diálogo para convencer de que el divisionismo y la “modernidad” autoritaria y déspota, ya no son opción en la capital del país.

Dijo que la estructura política y los partidos se encuentran en el descrédito y son cuestionados por una sociedad que exige cambios, compromisos claros y una calidad distinta de gobernantes, por lo que llamó a sus adversarios a no hacer oídos sordos.

Al iniciar su campaña hacia la jefatura de Gobierno, aseveró que los candidatos, partidos y gobiernos son el vehículo para cumplir objetivos mediante la obediencia de la voluntad popular.

“Eso a nosotros no se nos olvida”, puntualizó.

Informó todas y todos aquellos que dieron la vida por el cambio democrático y social en México estarán presentes en la campaña humanista; entre ellos los grandes luchadores que soñaron la igualdad en nuestro país.

Citó a Lázaro Cárdenas, Demetrio Vallejo, Valentín Campa, Othón Salazar, Raúl Álvarez Garín, Heberto Castillo, Rafael Galván, las víctimas de la guerra sucia y Ovando y Gil, además, los 600 asesinados de la revolución democrática de 1988 y las víctimas de la violencia de género y homofobia.

Marco Rascón señaló que su propuesta tiene un objetivo claro, que es la ciudad, sus habitantes y la solución de sus problemas.

“Requerimos un nuevo modelo de ciudad para desarrollar la economía y resolver los graves problemas que la quejan”.

Ofreció solucionar el desabasto de agua, la falta de visión para dar sustentabilidad y futuro a la metrópoli, la protección al medio ambiente, cambiar un modelo de movilidad fracasado y establecer un desarrollo urbano que anteponga el beneficio común a los interés privados”.

“Es momento de que la política pueda liberarse de quienes se han apropiado de ella. Es momento de que sirva a la sociedad para que se organice y las comunidades sociales se fortalezcan”, acotó.

Adelantó que su campaña se fundamentará en propuestas generales y específicas. Estará presente en los debates, buscará aportar al interés ciudadano y advertirá las implicaciones de votar a favor de más de lo mismo, y la necesidad de abrir una nueva etapa.

Propondrá certeza y futuro para no regresar al pasado, caracterizado por el autoritarismo y servilismo presidencialista. De ahí su apuesta por retomar al cambio social que inició en 1997.

“Nuestro compromiso hoy”, enfatizó, “será la austeridad, la participación y el apoyo ciudadano, la imaginación, la inclusión de los jóvenes y la búsqueda de diálogo transversal con vecinos, grupos, asociaciones y movimientos, además de personalidades de la ciencia, la cultura y la política.”

Consideró que una solución profunda de los problemas requiere acuerdos, y frente a los problemas de largo plazo, no tiene miedo a coincidir, pues “nuestra identidad democrática nos guiará para trabajar por el bien social y común”.

De ahí que antepondrá las coincidencias sobre las diferencias.

Rascón Córdova reconoció que promover su propuesta no será un tema fácil ante la estructura clientelar con recursos públicos que continuará. No obstante, advirtió que no teme a la crítica ni a la confrontación de ideas.

“Daremos argumentos, sin contemplaciones, contra las políticas excluyentes, contra el filo-priismo y contra el conservadurismo”, enfatizó.

Criticó los dispendios y los gastos excesivos de partidos, y la prevalencia de promocionales de candidatos sin contenidos ni propuestas, basados únicamente en la competencia del descrédito y la confrontación.

“En mi caso prevalecerá una campaña austera. Nos proponemos cambiar y sanear las formas de hacer política. Nosotros somos austeros por convicción”, adelantó.

A quienes se sienten invencibles, les dijo que la conquista ciudadana de un patrimonio democrático común se fue deteriorando en los últimos 18 años, al prevalecer visiones sectarias de partido y de la permanencia de grupos que pactan con intereses poderosos, “que buscan excluir, usar el desencanto y los vacíos de programas para su beneficio particular”.

En el proceso electoral en la Ciudad de México adelantó que su propuesta hablará con verdad “aunque les duela a otros”, al tiempo que aclaró que tampoco “será el fin ni será nuestro estilo, pero es inevitable”.

Propuestas de gobierno:

• Una Ciudad de todos, que escuche y en la que prevalezca el diálogo y la razón.

• Unir a la ciudad, convocar ideas, decidir las mejores y defenderlas.

• Abrir los ojos, humanizar las circunstancias y caminar juntos hacia un destino común.

• Una campaña austera, de propuestas, de diálogo y soluciones.

• Reconstruir la fuerza social y democrática, que fue construida hace 21 años.

• Retomar el compromiso inicial de un gobierno abierto, con
proyecto social y de vanguardia.

• Ejercer derechos y libertades con un gobierno comprometido, incluyente y transparente.

• Un gobierno abierto, comprometido y eficiente que reorganice la vida comunitaria y territorial, respetando su independencia y autonomía de organización.

• Reconstruir la Cuenca del Valle de México e iniciar la obra monumental de restablecer nuestra relación con el agua pluvial, la que desechamos y la que nos da la vida.

• Una política educativa y cultura de respeto a los derechos humanos sin distinción, con políticas públicas incluyentes.

• Ratificar el derecho al aborto, la adopción y los matrimonios homo-parentales.

• Velar por los derechos de los más desprotegidos y los invisibles, que han sido excluidos por el actual modelo económico.

• Ejercer con plenitud los derechos sexuales, políticos y sociales y terminar con la segregación social, política y familiar. No hay una sola familia, son muchas, diversas y deben ser respetadas.

• Privilegiar presupuestalmente el transporte público, alternativo y sustentable anteponiendo el avance tecnológico y energético.

• Establecimiento de expresos sobre los segundos pisos.

• Escuchar y trabajar juntos para tener una metrópoli sustentable, humana y solidaria; dialogar y anteponer las coincidencias frente a las divergencias.

• Defender la libertad de expresión y de manifestación, acompañada de diálogo público, abierto y constructivo.

• Anteponer el interés público sobre el privado y que la planeación estratégica se imponga sobre la especulación.

• Rectoría del valor del trabajo social, principal generador de
riqueza, mediante la reducción de la jornada laboral de 8 a 6 horas para generar mayor eficiencia y número de empleos.

• Implementar mecanismos para generar empleos para jóvenes recién egresados; generar procesos de innovación y de creatividad tecnológica, que generen y distribuyan riqueza, mediante un programa oficial de fomento.

• Derechos laborales a los eventuales.

• Renta Básica Universal contra el clientelismo y la manipulación de la pobreza.

• Creación de empresas y otorgamiento de créditos para jóvenes
que promuevan la innovación tecnológica y la cultura.

• Ciudad Nocturna con el propósito de ampliar, las 24 horas del día, los horarios de establecimientos mercantiles, servicios públicos, comercio, abasto y el esparcimiento.

• Combate a la sobrerregulación para la apertura y funcionamiento de establecimientos mercantiles.

• Promover el uso de nuevas fuentes de energía, la inversión productiva y el comercio de las distintas realidades de la Ciudad.

• Fomento y apoyo a los mercados públicos, hoy considerados Patrimonio Cultural Intangible de la CDMX, y un desarrollo local que mejore la economía de barrio, que apoye, que sea incluyente y justo.

• Trato preciso a los delitos de alto impacto que lastiman a las familias y su patrimonio y la elección por colonia de un “Juez Cívico y de Gestión Comunitaria”.

• Derogar la Ley de Participación Ciudadana.

• Despenalización del uso de la mariguana.

• Gobernar con visión de largo plazo.

• Acciones y acuerdos con la sociedad y las fuerzas políticas opositoras, que garanticen continuidad y sustentabilidad para los próximo 50 años.