Tras la puerta del poder

Roberto Vizcaíno

En tiempos electorales corren innumerables y muy ingeniosas versiones, propuestas, revelaciones de las cuales nunca se sabe su origen, aunque la intención es inocultable.

En los gloriosos tiempos de personajes como el del genio que es el Meme Garza, muchas se resumían en una frase popular: “es para medirle el agua a los camotes”, decían, y todos lo entendían.

Así grandes operadores políticos del régimen priísta, como Gustavo Carvajal, sacaron adelante candidaturas memorables, como la de Alfredo del Mazo González para el Estado de México, cuando ni siquiera pintaba frente a los tiburones políticos de aquel tiempo.

Gustavo coló en penúltimo lugar en una lista de 10 el nombre de Del Mazo González, un personaje surgido de la banca privada pero muy cercano a Miguel de la Madrid, quien habría de decir que Alfredo era el hermano que nunca tuvo.

Mediante esta argucia los grandes electores fácticos del Edomex –Carlos Hank González, Fidel Velázquez, Mario Ramón Beteta, etc- cuestionaron y vetaron a otros menos a Del Mazo, quien no representaba nada para ellos.

Y así el gobernador fue Del Mazo González.

Hoy en redes sociales circula una de estas fórmulas, que pudieran no ser tan ajenas a la realidad, y que más bien se antoja como un mecanismo de consulta popular, “pa’medirle el agua a los camotes, y ver si tienen o no consenso”.

Estas versiones sirven en realidad para ver qué aceptación tendría un acuerdo como el que se promueve o para definir su rechazo.

Firmado como un comentario de Ramón Alberto Garza de Reporte Índigo, un video plantea que está en curso la concreción de una fórmula electoral por demás interesante y viable.

De acordarse, esta fórmula estaría compuesta por José Antonio Meade, como candidato del PRI a la Presidencia de la República quien a su vez estaría acompañado por Margarita Zavala y Ricardo Monreal.

Esta fórmula competiría contra quien resulte finalmente ser el candidato del Frente PAN-PRD-MC, y contra Andrés Manuel López Obrador.

Se cerraría así la elección presidencial de 2018 sólo a 3 opciones.

Meade, coinciden prácticamente todos, es un personaje altamente competitivo en el contexto de la irritación social presente en México y en el mundo entero, por haber pasado eficientemente por 4 secretarías de estado en 2 sexenios, el de Felipe Calderón y el de Enrique Peña Nieto, sin tener ninguna sombra de corrupción que lo persiga.

Es apartidista y es la mejor muestra de una representación política del más alto nivel financiero reconocida por centros de poder económico nacionales y extranjeros.

En lo político Meade representa al centro nacionalista y es un personaje que crea confianza lo mismo entre los ciudadanos que entre el resto de los grupos y centro de poder.

Si a Meade le acompaña Margarita Zavala estaría garantizando un amplio voto panista en su favor y si se le agrega Monreal, estaría ocurriendo prácticamente lo mismo entre las bases de la izquierda.

Ninguno de los votantes de uno y otro sector –ni del PRI, PAN o PRD y otros-, se sentiría incomodo con votar por Meade y su fórmula Zavala-Monreal.

El caso es que Margarita Zavala se saldría del gran rompimiento anunciado al que lleva Ricardo Anaya al PAN, un rompimiento que es ya insalvable e irremediable ante los cortos tiempos electorales presidenciales.

Mientras que Ricardo Monreal se estaría a su vez salvando de la circunstancia de exclusión a que lo obligó Andrés Manuel López Obrador.

¡Pero! ¿y por qué Margarita y Ricardo Monreal harían tal cosa?

Porque de ir solos a una candidatura independiente estarían corriendo el riesgo de quemarse como la libélula en un fuego de ficciones.

En cambio, con Meade como presidente, podría Margarita bien ser, o la líder del Senado durante los siguientes 6 años, o titular de Sedesol, desde donde podría construir una verdadera candidatura ganadora para el 2024-2030.

Para Monreal sería colocarse en una candidatura ganadora real para la Ciudad de México amparado por el amplio paraguas del PRI, PVEM, Panal, Pes y otros, especialmente los grupos que se escindirán de, PAN, Morena y PRD.

Para algunos esta posibilidad es una mera fantasía, pero para otros, como mi amigo Alberto Aguilar Iñárritu, exsecretario Técnico de la Reforma del Estado y vicepresidente de la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina, la COPPPAL, y uno de los más serios estudiosos de la política mexicana, es algo que le lleva a responder con un: “por ahí va la cosa…”

En el sabio reduccionismo de los ciudadanos todo podría quedar en un: “para que la cuña apriete, ha de ser del mismo palo”.

Y es que la posible fórmula Meade-Margarita-Monreal suena justamente como una respuesta a la medida del Frente del PAN-PRD-MC, y para ajustarle cuentas al puntero de las encuestas López Obrador.

CUMPLIDOR

Peso sobre peso, el senador panista bajacaliforniano Víctor Hermosillo y Celada, entregó en días anteriores a Gustavo Sánchez Vásquez, alcalde de Mexicali los 100 mil pesos prometidos por él como donación para la pavimentación y bacheo en avenidas y calles de esa ciudad.

La cantidad corresponde a su donativo para los meses de agosto y septiembre del presente año, de acuerdo con su promesa hecha el 11 de abril cuando anunció que entregaría 50 mil pesos cada mes hasta concluir su mandatado el 30 de agosto de 2018.

Hermosillo y Celada entregó el 10 de mayo otros 200 mil pesos, estos correspondiente a los meses de febrero, marzo, abril y mayo. Y el 10 de julio entregó 100 mil pesos más correspondientes a los meses de junio y julio.

Estas sumas corresponden a prerrogativas a las que tiene derecho en la Cámara Alta como parte de servicios de alimentación, vales de despensa, vales de gasolina, mantenimiento de automóvil, gastos médicos y de capacitación.

El resto de los senadores guardan silencio.

QUE VAYAN A FONDO

Mariana Gómez del Campo, senadora de Acción Nacional exigió que la Auditoría Superior de la Federación, dependiente de la Cámara de Diputados, indague a fondo y hasta las últimas consecuencias el caso derivado del reportaje periodístico titulado “La Estafa Maestra”.

De acuerdo a este trabajo publicado por el portal Animal Político, donde se denuncia el desvío de 7 mil 670 millones de pesos realizado por 11 dependencias federales y ocho universidades, se podría haber incurrido lo mismo en los delitos de peculado, lavado de dinero o crimen organizado.

La senadora advirtió que la Procuraduría General de la República no puede eludir la tarea y que ante todo debe actuar no sólo con eficacia sino con total imparcialidad.

Gómez del Campo pidió a su vez al Senado de la República, convocar a la Secretaría de la Función Pública a una reunión de trabajo, con el fin de que informe de las acciones emprendidas contra servidores públicos presumiblemente relacionados con este tema.

La denuncia hecha en el trabajo periodístico indica que todo operó en dos pasos: una dependencia del Gobierno federal le da dinero a una universidad pública, y ésta lo transfiere a una empresa fantasma presumiblemente asociada con los funcionarios federales y los universitarios.

Bajo este mecanismo fueron subcontratadas 186 empresas y el cobro por la intermediación fue de entre el 10 y 15 por ciento del total del convenio.

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