Parque Jurásico Deportivo mexicano
Crónica de la ignominia
–Asamblea Anual del Comité Olímpico Mexicano, medio siglo de “armónica borregada”
–Sólo una belleza en medio de decenas de ancianos, dinosaurios del deporte nacional
–Incomodó al presidente de la FMF el tema de la investigación a Rafa Márquez
— 4 mil 41 días después, Damaris Aguirre recibe medalla olímpica de bronce
Ciudad de México a 08 de Diciembre (JESUS YÁÑEZ/ BALÓN CUADRADO ).-Ha terminado la rimbombante Asamblea Anual del Comité Olímpico Mexicano (COM), con Carlos Padilla Becerra, presidente, a la cabeza. Calca de una ceremonia acartonada, insulsa. Anacrónica, pues, hace casi medio siglo. Sólo sirve para la foto. Besamanos deportivo, llaman algunos reporteros con sorna. Como ocurre en la política nacional.
Una especie de parque jurásico del deporte.
La mayoría hace tiempo que cruzaron el dintel de la ancianidad. Algunos en silla de ruedas. Directivos, dinosaurios que también viven a costillas del presupuesto nacional.
Dura tres tortuosas horas.
Curiosa forma de loar la mediocridad.
A lo largo de su historia olímpica, México ha conseguido 69 medallas, que contrastan con las 220 de Cuba, país socialista, diminuta isla de 17 millones de habitantes, que padece más de 50 años de bloqueo económico por parte de Estados Unidos.
Decio de María Serrano –uno de los actores principales– fue abordado en la zona del estacionamiento. Lujosos autos y camionetas aguardaban a sus dueños. Un puñado de reporteros ametralló con preguntas al presidente de la Federación Mexicana de Futbol. Grabadoras, micrófonos y celulares apuntaban a su rostro.
La entrevista duró 15 minutos. De María, parte del teatro guiñol de Televisa, empresa que controla el futbol mexicano hace seis décadas, fue prolijo en sus respuestas. Una vez que concluyó se encaminó, bailándole la canosa melena septuagenaria, en búsqueda de su vehículo, enfundado en una fino traje y corbata.
–¿Con la investigación a Rafael Márquez –capitán de la selección nacional, jugador del Atlas y ex astro del Barcelona— por parte del Tesoro de Estados Unidos, por presunto lavado de dinero del narcotráfico, no afectó la parte comercial los ingresos del equipo, con miras al mundial?
La pregunta de quien esto escribe fue un balde de agua fría. Tenso, sin voltear a mirar a su interlocutor, el titular de la Femexfut y segundo vicepresidente del COM, balbuceó, cortante:
–Para nada.
–¿Ninguna empresa retiró su patrocinio?
Pesado silencio, la respuesta.
Apuró el paso, para dar por terminado el cuestionamiento que, obvio, lo incomodó.
Instantes después fumaba nervioso entre un par de invitados. Felipe Muñoz Kapamas, célebre medallista olímpico en México 68, uno de ellos.
Previamente, Decio, de profesión economista, había respondido a los reporteros que México, cómo todos los países, que estarán en Rusia 2018, “tenemos el deseo de ganar. Será un Mundial diferente”, y que no le “atemoriza” Alemania, Suecia ni Corea del Sur, “porque igual le habría tocado otro grupo fuerte.”
Puntualizó que se gestionan partidos amistosos y dos despedidas en Estados Unidos y en ciudad de México, en los seis meses que quedan de preparación ante el primer partido contra los germanos.
Unas horas después, informó, viajaría a Toronto a la reunión del comité organizador del certamen del 2026 que comparte con EU y Canadá.
A la asamblea anual, que comenzó a las 11:30 de la mañana, acudieron los de siempre, además de De María.
Entre otros: Olegario Vázquez Raña, miembro del Comité Olímpico Internacional (COI) –con Rubén Acosta Hernández, únicos mexicanos en ostentar ese cargo– presidente de la Federación Internacional de Tiro, propietario de Grupo Imagen y el diario Excélsior; Daniel Aceves, medallista Olímpico y titular de la Asociación Mexicana de Medallistas Olímpicos; Ximena Saldaña, primera vicepresidenta, quien extrañamente, también, es directora del Canal 11; Ricardo Contreras, titular de la Federación Mexicana de Boxeo Amateur hace casi 30 años; Jesús Mena, también medallista olímpico, ex titular de la Comisión Nacional de Deporte y Cultura Física (Conade).
También estuvieron: Liliana Suárez Carreón, presidenta del Comité Paralímpico Mexicano: Horacio de la Vega, director del Instituto del Deporte de la Ciudad de México; José Aguilar, a cargo de la Confederación Deportiva Mexicana, así como miembros permanentes, federativos, medallistas olímpicos e invitados.
Pero hoy fue un día especial.
Cuatro mil 41 días después, nueve años, la medalla olímpica de bronce fue recibida por la ex halterista chihuahuense Damaris Aguirre. Se entregó en los Juegos Olímpicos Beijing 2008. Pero el COI hizo un reacomodo en la obtención de las preseas, debido de los casos de doping a las competidoras bielorrusas que la habían conseguido.
Por ese motivo la recibió la atleta mexicana.
La atleta se enjugaba las lágrimas, mientras escuchaba las tiernas palabras de Carlos Padilla.
“Acto de justicia”, dijo lacónico.
Porque, añadió, la trampa y el dopaje se ponen al descubierto “tarde que temprano”.
Puntualizó que es una recompensa al esfuerzo, y un triunfo, agregó, del “honor y la honestidad”.
Salvo ese detalle, fue la misma ceremonia, insulsa, que comenzó antes de 1975, cuando Mario Vázquez Raña –fallecido en 2017– ocupó por primera vez la presidencia del COM –cargo que ostentó casi 40 años–, amén de ser uno de los más poderosos empresarios de la prensa nacional, dueño de la Organización Editorial Mexicana (OEM), prestanombres del ex presidente Luis Echeverría, comentan un par de reporteros.
En ese entonces había un ex presidente del COM que incomodaba, en casa informe anual, a “Don Mario” –como decían a Vázquez Raña—. Exigia que rindiera cuentas del generoso presupuesto oficial.
Nunca lo hizo
El diario El Financiero, incluso, osó publicar una crónica en la que resaltaba que Mario Vázquez, pese a leer su informe anual ante el presidente de la República –1994, con Carlos Salinas de Gortari–, solía habar con faltas de ortografía.
“Hace muchos años es la borregada de siempre o la harmonía de siempre”, ironizó uno de los decanos periodistas en cubrir la fuente del COM.
“Es, más bien, una armónica borregada”, resumió otro comunicador.
Otro viejo reportero, presente en el evento, comentó en Facebook, después de dicha asamblea:
“Hoy me indigné, vomité de coraje ver a un viejo decrépito, millonario al que muchos le besaban las manos. Ese deshonesto que acabó con el patrimonio de muchas familias de cooperativistas de Excélsior. Que indigno es presenciar a un tipo como Olegario Vázquez Raña.”
Uno de los dirigentes, que es una afrenta mayúscula del deporte nacional, tiene nombre y apellido: Ricardo Contreras, de box.
Su piel cetrina lo hace parecer demoniaco.
Julio Hernández, columnista de Astillero, del diario La Jornada, el 18 de agosto del 2016, escribió sobre él:
“Por cierto, en 2004, el reportero Jesús Yáñez Orozco publicó en El Universal una crónica de la sesión celebrada para relegir al licenciado Ricardo Contreras como presidente de la Federación Mexicana de Boxeo Amateur (FMBA). Llevaba, entonces, 16 años en el cargo, y actualmente ahí sigue.
“Escribió el cronista:
“Es como acudir a una asamblea priísta. Nada se objeta. Hasta las moscas votan en favor. Ni una abstención. Dos horas de palabras huecas y un sinfín de aplausos vacíos llenan el auditorio de la Confederación Deportiva Mexicana. Afuera, en una enorme manta blanca con letras negras se podía leer la postura de los opositores: ¿Quién es Ricardo Contreras? Dictador, favorecedor, mañoso, vengativo y vividor (http://goo.gl/JnH5pq).
“Con casi 30 años manejando el presupuesto para el boxeo aficionado, Contreras puso, con sentido efectista, a jóvenes a botear para financiar sus viajes de competencia. Pero ni remotamente Contreras y la FMBA son los buenos de la película. Tan malo el giro Alfredo Castillo (Conade) como el colorado Ricardo Contreras (FMBA).”
Ricardo Contreras solía rechazaba el término “bebesaurio” del deporte, que algunos reporteros le endilgaban, cuando tenía 15 años al frente de la FMBA.
Argumentaba que ese calificativo sólo se usaba en la política. Jesús Mena Campos, medallista olímpico, ex titular de la Conade, también acaparó la atención. No tanto por haber ejercido el mayor presupuesto en la historia del deporte oficial, en 2013, con total discrecionalidad, uno de los dos años que ocupó el cargo: 7 mil 179 millones en 2013.
Aunque había quienes decían, como Sandalio Sáenz de la Maza, también de cuño priista, y funcionario del deporte hace más de 40 años, actual encargado de fomentar esa actividad en el metro de la ciudad de México, que eran mil millones más.
Mena atrajo las miradas de los asistentes por su hija. Chaparrita, menos de 1.60 de estatura, unos 18 años de edad. Cuerpo escultural que se adivinaba debajo de un pants gris, playera blanca. Calzaba tenis.
Rubia. Rasgos finos. Nariz envidiable.
Una especie de Barbie de carne y hueso. Mirarla era un bálsamo al espíritu, entre el mar de ancianos.
Cargaba el portafolio del padre. Se despidió de Carlos Padilla, con beso en la mejilla, como que dice adiós a un bisabuelo.
Hubo otro que acaparó la atención de los reporteros: fue el “Tibio” Muñoz. Sobre todo porque el año venidero se cumplen 50 años de haber conquistado la memorable medalla de oro en natación, en la Olimpiada de México 68´.
–¿Cómo le va?, interrogó el periodista.
–Bien, respondió seco, aunque amable.
–¿En la legislatura pasada volvió a ser diputado federal por el PRI, no es así?
–Sí, pero ahora estoy sin chamba. A ver qué agarro,
–Quizá lo invite Andrés Manuel López Obrador, candidato de Morena a la presidencia de la República, a su campaña para el 2018, ya ve que ha sumado a miembros de otros partidos políticos.
El comentario del reportero no le cayó en gracia.
Lo miró como si padeciera estrabismo y tratara de adivinar qué subyacía en el comentario. Ambos sonrieron y se despidieron con apretón de manos.
Y sí: es el Parque Jurásico del deporte nacional.
@kalimanyez
