Contrafilo
*José García Segura
El “Efecto Rubí” es nada al lado del “Toque de Queda” ordenado por presuntos grupos armados, aplicable a partir de las 10 de la noche en la zona norte del Valle de México.
“no anden en las calles si no tienen a que salir…” señala el comunicado difundido por desconocidos, en protesta por el alza en el precio de la gasolina y por muchas otras cosas más.
”Venimos a meter orden”.
Por si sí o por si no, las fuerzas federales—Ejército, Marina, Policía Federal—comenzaron a patrullar la zona conurbada del Estado de México y la naciente Ciudad de México (CDMX); es decir, la delegación Gustavo A. Madero y los municipios de Ecatepec y Tlalnepantla.
Por si sí o por si no, los comercios chiquitos y grandotes cerraron sus puertas, el transporte público escaseó, la gente se encerró en sus casas y las calles permanecieron obscuras y vacías.
En rueda de prensa, el subsecretario de Gobernación, René Juárez Cisneros llamó a la prudencia y pidió “no dejarse confundir por rumores”.
Al cierre de edición, el gobierno federal había detenido a 250 personas acusadas de participar en actos vandálicos pero no reveló si alguno de los detenidos emitió el “Toque de Queda”.
El funcionario precisó que los actos vandálicos nada tienen que ver con las protestas por el gasolinazo.
De acuerdo con el secretario de Hacienda, el 36 por ciento del precio de gasolina corresponde a impuestos y el 51 por ciento a producción.
Eso en el Valle de México pero a nivel federal, a la inseguridad en carreteras agréguele el desabasto y alza al precio de la gasolina, al gas, al pasaje en el transporte, a la tortilla, en tarifas de luz y a los servicios en general sin olvidar, por supuesto, las protestas y bloqueos carreteros en 20 entidades del país
Sume todo eso y verá que caldo de cultivo espera al presidente Enrique Peña Nieto para lo que resta de su gobierno.
Además de la inseguridad, el robo, la extorsión y el secuestro, la fuerza de trabajo hispana que pasó navidad y año nuevo con sus familias enfrenta ahora escasez del producto en los más de 4 mil kilómetros por recorrer desde sus lugares de origen.
Cifras gubernamentales (Oficina del Censo de Estados Unidos e INEGI) refieren que los migrantes hispanos en Estados Unidos suman poco más de 50 millones de personas
