Revelan operativo de Morena para comprar votos en Coyoacán
David Polanco / CDMX Magacín
Con tal de convencer para ganar adeptos, Hannah de Lamadrid viola la ley electoral en la Ciudad de México, al entregar bienes con carácter social como son sillas de ruedas, bastones y andaderas en plena campaña electoral.
De acuerdo con fotografías que se comparten en chats vecinales y para comprobar que sí están cumpliendo la instrucción, el equipo la ex priísta se dio a la tarea de portar gorras y playeras para dejar claro que son quienes han cumplido la orden de entregar este tipo de ayudas sociales, lo que no está permitido durante los procesos electorales.
Además, tampoco se ha hecho público el origen de los recursos con los que se adquirieron estos productos que se van entregando puerta por puerta.
La entrega de estos enseres se da de manera coincidente con la llegada del senador José Ramón Enriquez Herrera, ex presidente municipal de Durango, quien fue traído a la campaña en Coyoacán para realizar trabajo con un equipo de ex priístas y ex emecistas que convocó desde su tierra natal.
Han establecido como su centro de operaciones y reuniones un restaurante del centro de Coyoacán, frente a la llamada Plaza de La Conchita.
Cabe destacar que Enriquez Herrera enfrentó varios procesos legales como presidente municipal de Durango e incluso hubo señalamientos públicos de su cercanía con liderazgos de la delincuencia organizada, así como compras de luminarias a sobreprecio y promoción personalizada en el estado, lo que le valió una sanción la cual fue aprobada por todo el Congreso del estado de Durango.
Los responsables de esta operación son Felipe Pérez y Jorge Mota, quienes firman los mensajes en los chats a nombre de Hanna de Lamadrid, chats en donde las y los vecinos se comparten información sobre los presupuestos participativos.
En las fotos aparecen los representantes de la ex priísta quienes portan playeras de Claudia Sheinbaum porque a de Lamadrid la dejaron, desde el inicio de la campaña, sin apoyos de utilitarios y tuvo que repartir los de la candidata a la presidencia. Lo que los identifica sí son las gorras que fue para lo único que les alcanzó para repartir en su campaña.
Esta acción se suma a otras ilegalidades de la expriísta como la pega de calcomanías promocionando a las candidaturas del estado de Puebla, en Coyoacán y a las agresiones clasistas en contra de una persona de la tercera edad en la unidad habitacional STUNAM.