¿Se acabó la creatividad en el ‘cuarto de guerra’ de Clara?
Glorieta de Colón
Al parecer, en el cuarto de guerra de Clara Brugada ya se les acabó la creatividad, pues no salen de la misma estrategia que no les está dando resultados, sino al contrario, que la esta llevando a perder simpatías entre los electores, que la encamina a la derrota el 2 de junio.
Sus grandes temas son el “cártel inmobiliario”, para quemar a la oposición y el candidato Santiago Taboada, ese que ya ni escucha la gente porque nunca tuvieron un caso sólido que además provocara enojo a los ciudadanos. Muchos ni entienden lo que quiere decir Morena con esa frase.
Y el segundo asunto trillado es que supuestamente Brugada va arriba en todas las encuestas que se han publicado, y trae una dizque ventaja promedio de 18%. Este lunes lo volvió a decir y hasta envió un comunicado. Si ellos se la creen, andan perdidos.
Y si no se la creen pero lo hacen como forma de campaña, peor, porque en la Ciudad de México –y probablemente ni en todo el país– van a provocar que la gente no salga a votar. No se ve fácil, pero todavía les queda un mes para que cambien el paradigma.
Quejas por calumnias
De las más de mil quejas que han presentado los partidos políticos durante las campañas electorales, la que más abunda es la de “calumnias”, pues se han dicho de todo de ambos bandos. La autoridad electoral, hasta hoy, no ha considerado casi ninguna como grave y por eso prácticamente no ha dictado medidas cautelares urgentes.
La presión de Morena sobre la Comisión de Quejas se acentúa, ante la complacencia de la presidenta de IECM, Patricia Acevedo, que le atribuyen haber permitido la intromisión del GCDMX en el organismo electoral.
Desesperación en Azcapotzalco
En la Alcaldía Azcapotzalco ve Morena las cosas tan perdidas, que ahora se sacó de la manga una denuncia porque supuestamente hay funcionarios de la demarcación haciendo campaña para la alcaldesa con licencia, Margarita Saldaña, del PAN, PRI y PRD. Parecen patadas de ahogado de los morenistas, porque su candidata Nancy Núñez nomás no levanta.
