Sueños de Disney, exitosa y rentable: Lorena Ochoa
Ciudad de México a 29 de septiembre ( CÍRCULO DIGITAL).-Lorena nos enseñó a ver golf, a estar pendiente de la televisión más tiempo que en un partido de futbol, aprendimos qué era un birdie, un bogey, un eagle, nos enseñó que no todos los ídolos tenían que ser soberbios, derrochadores y terminar en una cantina. De Lorena aprendimos que la discreción puede ser una gran cualidad, aprendimos a hablar de ella por sus cualidades deportivas y humanas. Nos enseñó que ser el número uno no significa que lo tienes que estar diciendo tantas veces como sea posible. Lorena también nos mostró, apenas hace unos días, lo vulnerable, tierna y agradecida que puede ser cuando habla de su familia, cuando se le quebró la voz, a muchos se les hizo un nudo en la garganta.
Lorena es una de las atletas mexicanas (de cualquier género) más exitosa de todos los tiempos. Su reino, nunca concluirá.
•••
Si tomas un taxi en la Catedral de Morelia y le pides que te lleve al campo de Tres Marías, tienes que saber que te tomará unos 20 minutos. ¿Es mucho? Pues depende con qué ojos lo mires. Antes, hace una década te podía llevar el doble o hasta el triple del tiempo. No es que se hayan construido puentes, lo que pasa es que ahora ya no es tan transitado, porque Lorena ya no juega allí un torneo.
Lorena fue un fenómeno mediático. Y ahora, con pocos reflectores, sigue siendo capaz de ser una marca y un ejemplo a seguir (y de paso, desde el martes, una leyenda tras su inclusión al Salón de la Fama).
Lo más común es que después del retiro de un deportista las empresas tomen su camino. Se acabaron los sponsors. Pero con Lorena no ocurrió así. Personas de CitiBanamex aseguran que para la compañía es una de las personas que mejor proyecta los valores del banco y piensan que su relación durará por muchos años. Una cosa similar debe pensar Lacoste.
Lorena Ochoa es una marca y tiene varios datos que presumir, por ejemplo, estuvo como número uno del mundo por 157 semanas. Es decir, tres años siendo la mejor del planeta, compitiendo en todos los continentes y mostrando que ese sitio le correspondía.
Y sí, hace 11 años, Lorena era capaz de provocar tránsito vehicular, familias enteras viendo un deporte “de ricos”, debates en comidas, que la televisión abierta le hiciera seguimiento puntual a sus torneos, canales como ESPN empezaran a tener más audiencia. Y todo eso tuvo sus frutos.
Por ejemplo, el día después de ser entronizada en el Salón de la Fama, fue invitada a una charla de inclusión de género apoyada por Citi (la matriz de CitiBanamex), tiene su programa de televisión (desde el 2012) VIVE el Golf que se transmite en CNN y mantiene otros sponsors, además de la institución bancaria, como Ping, Lacoste y otros más.
Y pensar que su carrera de golf inició porque lo que ella quería “era ir a Disneylandia, sólo eso”. Su padre le prometió que si era parte de la Selección Mexicana de ocho años, la llevaría a aquel sitio de juegos y fantasías. Pues sus sueños llegaron tan lejos como los de Mickey Mouse, Mimi o Pato Donald.
•••
Llegar al campo de golf Tres Marías era una procesión, de autos, de vendedores. Mirar a Lorena se convirtió en un espectáculo para los que sabían de la disciplina y hasta para los que no.
Señoras con sombreros pomposos, hombres con camisa abierta hasta el pecho y con los lentes negros, así, subiendo por el campo de Tres Marías, escalando y recorriendo el campo junto a Lorena.
Todos terminaban empapados de sudor, colorados, quemados, sedientes y felices, muy felices. Hace 11 años Lorena ganó allí su primer torneo en México.
En algún momento nuestro país tuvo hasta tres torneos de LPGA por el impacto de Lorena. Además de algunos manos a mano con en alquel entonces su mayor rival, Anikka Sörestam en Acapulco y fue el motor principal para que en un año pudiera ser el principal motivo de la derrama económica de 400 millones de pesos debido a sus presentaciones en sus torneos en nuestro país de acuerdo con la base de datos de El Economista.
En el 2009 este diario publicó un artículo titulado: “Lorena Ochoa, nombre que vale millones”. La frase que a continuación leerá es de esa fecha… pero créame, le podríamos haber engañado y decirle que era de ayer:
“Lorena se ha visto ayudada por la imagen que ha proyectado. Ha trascendido en el aspecto social. Es una mujer deportista que ha sabido comercializarse y de esta manera es un producto que es atractivo no sólo para el mercado nacional sino también internacional”, aseguró Rogelio Roa, director comercial de la agencia DreaMatch Solutions.
Entre el 2003 y 2017, la mexicana ha logrado tener ingresos de al menos unos 30 millones de dólares. Ninguna deportistas mujer ha logrado tener tantas ganancias y de paso sigue facturando. Su sueño de Disney, podríamos decir que sigue vigente.
PD. En tiempo de Ochoa, llegar a Tres Marías en Morelia, te podría llevar hasta una hora del centro de la ciudad al campo de golf. Lore movía masas.
Con Información de ElEconomista