Trump evalúa cambios en la forma en que prensa cubrirá Casa Blanca
WASHINGTON, 116 de diciembre, (MOMENTO INFORMATIVO / CÍRCULO DIGITAL).- La relación contenciosa del presidente electo Donald Trump y la mayoría de la prensa estadunidense podría llegar a la Casa Blanca, en especial entre los medios de información y la vocería de la casa presidencial, una vez que asuma el cargo en 2017.
Trump, quien a lo largo del proceso electoral acusó a muchos medios de deshonestidad en la cobertura de su campaña y su persona, ha externado a través de algunos de sus voceros, la posibilidad de modificar de manera significativa la forma en cómo la prensa cubre la Casa Blanca.
Sean Spicer, vocero del Comité Nacional Republicano y asesor del equipo de transición de Trump, dejó en claro que lo que el presidente electo no hará será prohibir el acceso a la Casa Blanca de algunos medios, como lo han propuesto algunos de sus más fervientes seguidores.
Aunque durante la campaña electoral Trump prohibió por algún tiempo el acceso a sus eventos políticos a medios como los diarios POLITICO, The Washington Post y el portal electrónico BuzzFeed, Spicer aseguró que ese no será el caso en la Casa Blanca, una vez que Trump asuma el cargo el próximo 20 de enero.
“No no, él (Tump) no va a prohibir (el ingreso) de nadie. Absolutamente no. El tiene una saludable creencia en la primera enmienda (que garantiza la libertad de expresión) y entiende el papel de la prensa”, aseguró Spicer a la cadena de televisión Fox.
Spicer pareció anticipar, sin embargo que podría haber cambios en el esquema diario de operación de la oficina de prensa en su interacción con los medios de información, en especial en lo que se refiere a la cotidiana conferencia de prensa.
“Tenemos que mirar todo. No sé (si la conferencia) tiene que ser todos los días. No sé si todo necesita ser frente a las cámaras, y ese es un punto de vista compartido por varios exsecretarios de prensa y algunos en la prensa”, dijo durante una entrevista en el programa The Kelly File.
Spicer indicó que para algunos críticos del esquema actual, las conferencias de la vocería de la Casa Blanca se han convertido en un espectáculo.
“Y quizá haya una manera más efectiva de comunicar las noticias y tener una conversación de adultos apropiada con la prensa para informar de las acciones del Presidente”, consideró.
Los comentarios de Spicer se sumaron a los del entrante jefe de gabinete de la Casa Blanca, Reince Priebus, actual presidente del Comité Nacional Republicano (RNC), quien indicó en fecha reciente que además de la conferencia de prensa, se podría eliminar la manera en cómo se asignan los asientos en la sala de prensa.
Está última posibilidad no cayó bien entre algunos de los principales medios de comunicación y en la Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca.
En la actualidad existen 49 asientos en la sala de prensa de la Casa Blanca reservados para los principales medios de comunicación nacionales e internacionales –algunos rotados entre dos organizaciones-, cada uno con una placa metálica que deja en claro quién es su ocupante.
Aunque durante la presidencia de Ronald Reagan la Casa Blanca era quien asignaba los asientos, a partir de la administración de George W. Bush la tarea es responsabilidad de la asociación con base en criterios no del todo claros.
Cuestionado al respecto, el vocero presidencial Josh Earnest recomendó el miércoles a la administración entrante familiarizarse con aspectos básicos de la operación de la sala de prensa conforme evalúan los cambios de políticas que consideren necesarios en este ámbito.