Tras la puerta del poder

Roberto Vizcaíno

Ahora sabemos que el lunes 2 de este octubre, el exdiputado federal panista Miguel Ángel Toscano, también ex titular de la Cofepris, presentó denuncia de fraude contra Ricardo Anaya ante el INE.

La conclusión simple nos indica que, de resultar cierta la base de la denuncia de Toscano, el obstinado queretano quedaría inhabilitado como candidato del PAN a la Presidencia de la República.

No me queda claro si esa inhabilitación alcanzaría para impedirle además ser el candidato presidencial del Frente Ciudadano por México, ya que las alianzas partidistas dejan de lado a los estatutos que las integran.

En fin.

El caso es que Toscano asegura en su denuncia ante el INE que en la XVIII Asamblea Nacional realizada por el blanquiazul el 21 de noviembre de 2015, el panista Diego Dávila presentó una reserva, “para que los presidentes, secretarios generales y tesoreros de los comités municipales del PAN pudieran permanecer en sus puestos hasta un día antes de registrarse como precandidatos en caso de que les interesara competir por un puesto de elección popular”.

La reserva fue aprobada por mayoría y registrada en su libro por el Notario Público 5 del entonces Distrito Federal, Alfonso Zermeño Infante.

Pero luego resultó que la reserva aprobada fue alterada para incluir en ella a los integrantes del Comité Ejecutivo Nacional del PAN.

El tema podría ser irrelevante si no es porque lo establecido por los estatutos anteriores indica que Ricardo Anaya debió haber renunciado a la dirigencia nacional blanquiazul el pasado jueves 7 de agosto, es decir, un día antes de que iniciara formalmente el proceso electoral para Presidente de la República.

¡Claro!, si es que Anaya quisiera ser candidato del PAN a ese cargo, intenciones que para sus opositores no tienen la menor duda.

De acuerdo a los documentos rescatados por Toscano, el panista Diego Dávila habría dicho a la Asamblea blanquiazul:

“Me permito proponer se modifique el artículo 48, numeral cuatro, del proyecto de estatutos que se somete a nuestra consideración, para quedar en los siguientes términos: ‘Sin perjuicio de las licencias a las que hacen referencia los párrafos anteriores, los presidentes, secretarios generales, tesoreros y comisiones directivas provisionales y comités directivos o delegaciones municipales que decidan contender como candidatos del partido a cargos de elección popular durante el periodo para el cual fueron electos, como dije antes, deberán renunciar o pedir licencia al menos un día antes de la solicitud de registro como precandidato en los tiempos que señale la convocatoria interna correspondiente’”.

Su propuesta no incluía a nadie del Comité Ejecutivo Nacional del PAN.

Pero en las reformas presentadas por Anaya al INE apareció ya alterado este párrafo.

Y los nuevos Estatutos fueron aprobados por el INE y publicados en el Diario Oficial el viernes 1 de abril de 2016 con el texto fraudulento.

Hoy Anaya camina tranquilamente (cínicamente, aclaran sus opositores) por México como presidente del PAN y principal aspirante a la Presidencia de la República por este partido, gracias justamente a esta alteración. Será fraude cuando lo determinen las autoridades.

Y asi puede seguir hasta un día antes del registro de precandidaturas a la Presidencia.

Toscano pide de entrada al INE inhabilitar a Anaya. Y reponer la reforma aprobada.

Y afirma:

“Acuso directamente de falsificar esta acta a Ricardo Anaya y a Damián Zepeda, que es su secretario general, pero a ellos dos. Damián Zepeda es brazo derecho de Ricardo Anaya, y es su operador, pues evidentemente él supo de esta modificación”.

ES UN ASUNTO DE CÁRCEL

Para Ernesto Cordero, presidente del Senado y uno de los principales opositores de Anaya, la denuncia de Toscano es simple y llanamente un fraude. Un tema de consecuencias penales.

“Es una situación gravísima el que hayan alterado una reforma aprobada… lo que aprobó una Asamblea…

“Eso es fraude, muy grave… si esto hubiera sucedido en una empresa, si alguien hubiera modificado los acuerdos de un Consejo de Administración, o de una Asamblea, y los hubiera modificado para su favor, eso tiene consecuencias hasta penales.

“Me parece que lo que hizo la dirigencia del Partido Acción Nacional, para beneficiar a Ricardo Anaya, va más allá de lo que es prudente, y de lo que es decente, y de lo que es honorable.

“Es un exceso, es un fraude, engañar a una Asamblea de esta manera, debe tener consecuencias”, indicó.

–       ¿El INE debe rectificar…?

“El INE tiene que llegar al fondo… ver que lo que la Asamblea aprobó eran los plazos de renuncia de los presidentes de los comités directivos municipales, no del Comité Nacional, y que el presidente del Comité Ejecutivo Nacional falseó lo que se aprobó en la Asamblea, para su beneficio personal.

“Eso se llama abuso, eso se llama fraude, y eso es muy grave, y el INE deberá de tomar cartas en el asunto”.

–       Si esta alteración intencionada se hizo en 2015, ¿significa que Anaya ya planeaba desde ese entonces ser candidato a la Presidencia?

“… por supuesto. Es un proyecto personal que él ha venido construyendo, a base de traiciones y a base de mucho tiempo, y es evidente que todo esto fue en su beneficio personal”, agregó Cordero.

TAN CAMPANTE COMO JW

Y mientras eso ocurría, Anaya se presentaba junto a Alejandra Barrales y Dante Delgado en el programa de Carlos Loret en Televisa para hablar del Frente Ciudadano por México.

Ahí, como cosa casual, Anaya afirmó que el Frente “es más grande que las aspiraciones políticas de cada uno; (que) el país no va por el camino correcto, (que) el Régimen está agotado, (que) ya no le sirve al país”.

Y que por todo eso y más él, Barrales y Dante se han planteado 5 objetivos:

–       Combatir y someter a la corrupción, la pobreza y desigualdad, la impunidad, porque la ley no aplica igual para todos; la violencia, porque estamos en los peores niveles de 20 años, y el tema económico, porque queremos empleo con salarios dignos para todos los mexicanos.

En cuanto a las candidaturas, dijo:

“Yo concentro mi responsabilidad en la dirigencia del PAN en sacar los acuerdos del Frente; no estoy pensando en la candidatura en este momento”.

Sus opositores al interior del PAN afirman que Anaya, Barrales y Dante obviamente ya no piensan en las candidaturas ni sudan ya calenturas, porque todo ha quedado en un acuerdo cerrado entre ellos: Anaya va como candidato a la Presidencia del Frente, Barrales para la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México y Dante, pues trae ya el compromiso de obtener una súper cartera gubernamental, quizá una nueva senaduría y el manejo de presupuestos multimillonarios.

Lo más que dice Anaya es:

“Lo hemos hablado, y acordamos una fórmula: primero está el país, después el Frente y después los intereses personales, es un asunto en el que está el país en juego y vamos a actuar con muchísima responsabilidad”.

Sí cómo no, dicen los de la otra orilla.

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