Urge impulsar el vino mexicano

Oleajes

Oscar Vázquez C.

De acuerdo al estudio “Panorama mundial del vino y oportunidades para México”, de la Organización Internacional de la Viña y el Vino, durante 2016 el consumo de vino en México registró un incremento del 10 por ciento, al alcanzar los 89.5 millones de litros; correspondiendo el 30 por ciento a la producción nacional, el 70 por ciento restante se importó de España, Francia, Chile, Argentina, Estados Unidos, entre otros.

El consumo fue de 750 mililitros per cápita, el cual podría decirse que es bajo frente a  20, 37 y 47.7 litros que beben en España, Italia o Francia, sin embargo los mexicanos registran una tendencia al alza respecto a la preferencia del vino .

Hasta el momento los principales estados productores de vino –según el Consejo Mexicano Vitivinícola A.C.- son Baja California con 75% de la producción total;  seguido de los estados de Coahuila, Querétaro, Aguascalientes, Zacatecas, Chihuahua, Guanajuato, San Luis Potosí, Puebla, Sonora y Nuevo León.

Frente a este panorama, en el Senado de la República se tiene una iniciativa para expedir una nueva Ley General de Fomento a la Industria Vitivinícola, con el propósito de establecer la intervención pública del Estado mexicano, en sus tres niveles de gobierno, que permita el diseño de políticas y esquemas de fomento para el desarrollo sostenible de la industria vitivinícola nacional.

De acuerdo con el texto de la iniciativa, las estrategias que se implementen para impulsar al sector, deben considerar esquemas de crecimiento de la productividad, considerando el sector primario que es el campo y la producción de vid, así como de los procesos industriales utilizados para la elaboración de vinos de mesa.

Senadores como Héctor Larios, Marcela Torres Peimbert, Victor Hermosillo, Ernesto Ruffo Appel, Rosa María Díaz Lizama, Sonia Rocha Acosta y Jesús Santana García, han unido fuerzas con la Conago y Consejo Mexicano del Vino y la Asociación Nacional de Productores de Vino, para sacar adelante la iniciativa con el propósito de impulsar la comercialización, distribución, y una adecuada promoción de la categoría del vino mexicano ante el público consumidor.

Los senadores quieren una ley que impulse al sector vitivinícola “no sólo por su valor económico y por la influencia que tiene en el campo, en el turismo, en la industria gastronómica, que es patrimonio de la humanidad, sino también como factor de unidad e identidad nacional”.

Es evidente que el vino mexicano fiscalmente no compite en igualdad de condiciones con los vinos extranjeros, por ello la diferencia de precios que muchas veces queda a un lado de las preferencias de consumo. En este sentido es pertinente recordar las palabras del senador Ernesto Ruffo Appel “México no es competitivo fiscalmente hablando, no solamente en el rubro del vino, sino también en otros aspectos”.

En este sentido, se pronunció por que México compita en el terreno fiscal a nivel internacional, lo que no implica ventajas especiales para el productor de vino, sino que se cobren impuestos con base en la referencia de otros países productores de vino de mesa.

Sin duda, en México está tocándose la puerta para que haya un crecimiento de la industria del vino y sea impulse el consumo del vino nacional que en la industria restaurantera y turística. Hay estados como Baja California, Guanajuato y Querétaro que tienen una gran actividad a favor del vino. Ya no hay tiempo para retrasar el crecimiento definitivo del vino México.

Por cierto, el 20 y 21 de septiembre, se realizará la muestra “México Nación de Vinos”, que busca impulsar el consumo de vino en el país, y acercar vinos mexicanos para los mexicanos; unificar proyectos de diferentes casas vitivinícolas y difundir nuevos esquemas como la creación de un Club de Vinos e incluso fortalecer la venta de los mismos vía comercio electrónico.

“México Nación de Vinos” congregará en la edición de este año a más de 75 bodegas productoras de esta bebida de 11 estados del país y busca beneficiar a los sectores relacionados con la industria del vino y generar oportunidades de interacción entre productores y el público en general.

En el evento habrá degustaciones de bodegas productoras, museo interactivo, paseo por los procesos de vinificación, talleres y conferencias especializadas.

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