Tras la puerta del poder

Roberto Vizcaíno

Ricardo Monreal presentó hace unos 10 días la lista de 41 nuevas reformas, varias Constitucionales como la que prevé el rediseño a fondo del Poder Judicial, que deberán ser tramitadas ente este naciente septiembre y diciembre próximo.

Sin duda entre las primeras grandes tareas está la aprobación del Presupuesto de Ingresos y el Presupuesto de Egresos para 2020.

Todo eso requiere de acuerdos y de la voluntad política de todos los senadores y diputados que integran el Congreso.

Pero eso está hoy fracturado porque a un grupo predominante de diputados federales de Morena encabezados por Dolores Padierna, se ha propuesto no rotar la presidencia de San Lázaro como estaba pactado desde hace un año y como está establecido en la Ley del Congreso.

Y han decidido que Porfirio Muñoz Ledo sea reelecto… junto con Padierna como vicepresidenta.

Todo bajo el argumento de que Morena tiene hoy la mayoría dominante en ambas cámaras y que por lo tanto el esquema de rotación de la presidencia en San Lázaro debe modificarse para que Muñoz Ledo se quede en el cargo durante los 3 años de la legislatura.

La rotación de la presidencia fue concebida desde hace años como esencial para lograr equilibrios entre todas las fracciones en reconocimiento al sistema democrático, y a la pluralidad existente en la sociedad mexicana.

De acuerdo a todo eso y más, estaba previsto que el siguiente año legislativo 2 diputados de Acción Nacional ocuparan ese cargo. Y que el tercer y último año de la 64 Legislatura, de septiembre de 2020 a agosto de 2021 lo ocupara un priísta.

Ya no podrá ser así. Y para sellar bien sellado el agandalle de la presidencia en San Lázaro, Morena y socios -PT y PES con Verde-, ya tienen lista la inmediata aprobación de una reforma del artículo 17 de la Ley Orgánica del Congreso General que permitirá que Muñoz Ledo… y doña Dolores, encabecen la mesa de aquí a agosto de 2021.

Por supuesto que este agandalle le saldrá caro a Morena, y en especial al Gobierno de Andrés Manuel López Obrador quien verá que sus reformas constitucionales se quedarán atoradas por la falta de la necesaria Mayoría Calificada en San Lázaro y en el Senado.

Ayer mismo el coordinador de los senadores de Acción Nacional, el queretano Mauricio Kuri ya adelantó que “no hay condiciones para aprobar reformas constitucionales en el Senado”.

Y consideró como deplorable la decisión de Morena en la Cámara de Diputados, “al pasar por encima de la ley e impedir la pluralidad en el Poder Legislativo…”

PRI, MC y PRD van en apoyo del PAN en su reclamo.

 “Que se vuelva a tomar el camino del diálogo, porque si no aquí en el Senado vamos a tener complicaciones”, dijo Miguel Ángel Manceracoordinador de la mini-mini bancada del PRD.

Y como López Obrador ya se hizo a un lado de intervenir en ningún asunto del Legislativo y el Judicial, pues…

EL TRIFE DA LA RAZON JURIDICA Y MORAL A MONREAL

En el otro lado de la acera legislativa, en la del Senado, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación emitió ayer por unanimidad una sentencia que desecha, anula, y condena la intromisión de la Comisión de Honor y Justicia de Morena que pretendía exigir la reposición de la elección de Mónica Fernández como candidata a la presidencia del Senado.

La Comisión de Honor y Justicia de Morena buscaba apoyar así la reelección de Martí Batres.  

Una vez emitido el fallo del Tribunal Electoral que revoca la resolución de la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia de Morena, Ricardo Monrealcelebró que el fallo fuse emitido por unanimidad con lo cual, dijo, deja en claro que “nos asistió la razón jurídica y moral. La legalidad se impuso”, subrayó.

El TEPJF afirmó que la Comisión de Honor y Justicia de Morena simplemente no tiene competencia formal ni material para conocer y resolver de asuntos relacionados con el derecho parlamentario, como los actos emitidos por los Grupos Parlamentario

Así, por unanimidad, la Sala Superior del TEPJF revocó la resolución de la Comisión de Honestidad y Justicia de Morena y con ello enterró las ambiciones desmedidas de Batres, quien todavía tenía esperanzas de -por algún milagro- reelegirse como presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República.

Al recibir la sentencia, Monreal indicó que la Comisión de Honor y Justicia de Morena fue manipulada políticamente para intentar anular un proceso legal y legítimo de la fracción senatorial de este partido.

Siempre fue claro que había una intromisión de un partido político en asuntos que competen de forma exclusiva al Poder Legislativo.

 “Se debe tutelar que los partidos políticos ajusten su conducta a los principios constitucionales que los rigen, así como aquellos que se sustentan en el sistema democrático e institucional del Estado, como lo es la división de poderes”, subraya la sentencia.

Indica además que, si bien las normas de organización y funcionamiento de una bancada podrían considerarse como parte de la vida interna de un partido político, “lo cierto es que las determinaciones, que tales Grupos Parlamentarios y sus legisladores, decidan en el ámbito de su función legislativa corresponden al derecho parlamentario, por lo que quedan fuera de todo control partidista”.

En otra sentencia, el Tribunal resolvió reencauzar este juicio electoral a un juicio para la protección de los derechos político-electorales del ciudadano.

Ello, “toda vez que los actores reclaman una resolución emanada de un partido político, aduciendo que afecta su derecho a ejercer el cargo para el que fueron electos”, por lo que se precedió a reencauzar este juicio por ser la vía procedente e idónea para resolver la controversia planteada.

Con ello Martí, quien no termina de asimilar su derrota, queda todavía más hundido en el descrédito, sobre todo porque ayer continuó alegando que el Tribunal “no le entró al fondo del caso”.

¿Quería más?, ¿en serio?

EL PRIMER DÍA DE MÓNICA

Y ya que andamos en esta, vale la pena destacar que hoy será el primer día de la presidencia formal de Mónica Fernández en el Senado.

Por puro morbo -pa’que decimos que no- valdrá la pena estar en el arranque de esta presidencia sobre todo para ver si Batres ocupa su escaño, rodeado de quienes votaron al final masivamente en su contra.

Feo caso el suyo. Pudo haber aceptado desde el principio la inercia del cambio de la presidencia, ahora marcada por la equidad de género,  y buscar el acomodo privilegiado en una posición sobresaliente dentro de su grupo de Morena por haber sido el primer presidente del Senado en la 4Ta Transformación.

Pero no, se le calentó la cabeza y se fue a buscar contra viento y marea, pero sobre todo con malas mañas, acusaciones sin base -como el del reparto de cañonazos-, su reelección.

Y al hacerlo se enfrentó no sólo con Monreal, quien es el que busca y logra los acuerdos y los equilibrios por ser el coordinador de la mayoría de Morena, y por ser a la vez el presidente de la Junta de Coordinación Política, sino con el grupo senatorial de Morena.

Quedó mal con todos y con los de las otras fracciones. Ese es ahora su escenario.

Hoy en este contexto la tabasqueña Mónica Fernández comenzará a escribir su historia.

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