Ya les ganó Taboada
Mensaje Político
Alejandro Lelo de Larrea
El mensaje político fue muy claro: Santiago Taboada entró al recinto donde rindió su quinto informe de gobierno junto a la virtual candidata presidencial del Frente Amplio por México, Xóchitl Gálvez, quien más tarde expresaría que el alcalde de Benito Juárez es la mejor carta que tienen para la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México.
Pero antes, durante el informe, el mensaje político se terminaría de redondear con el respaldo para Taboada, casi unánime, de pie, por parte de los invitados, en especial los personajes que deciden en el panismo, que se confirmó lleva mano en la selección del candidato para la capital.
Cuando el alcalde de Benito Juárez anunció que quiere competir por la Jefatura de Gobierno, la primera en ponerse de pie y comenzar a corear “¡jefe de gobierno!, ¡jefe de gobierno!” con el brazo en alto fue la propia Xóchitl; junto a ella, también Marko Cortés, líder nacional del PAN, y a unos metros Jorge Romero, el mandamás del panismo en la capital del país. “El que entendió, entendió; que no haya ilusos para que no haya decepcionados”, dijo un panista esa frase que le atribuyó al Jefe Diego.
Era fiesta para todos, bueno, casi todos. Por lo menos dos excepciones, dos suspirantes que a la hora de corear “jefe de Gobierno” a favor de Taboada, ni se pusieron de pie. Sandra Cuevas, alcaldesa de la Cuauhtémoc, sin militancia partidista, y el priísta Adrián Rubalcava, de Cuajimalpa permanecieron sentados, perplejos.
Contraria actitud mostraron otras aspirantes del PAN: la senadora Kenia López Rabadán o la alcaldesa de Álvaro Obregón, Lía Limón, quien es el Plan B de los panistas. Ambas se levantaron también de su lugar corear a favor de Taboada.
Buena jugada del panismo, que junto con sus aliados del PRI y el PRD tienen enormes posibilidades de ganar la CDMX. Datos objetivos que arrojan un difícil panorama para Morena: al presidente López Obrador lo aprueba menos del 50% de los chilangos. En 2021, los morenistas perdieron las elecciones: tuvieron 1 millón 749 mil 306 votos, y la alianza PAN, PRI y PRD logró 1 millón 841 mil sufragios, casi 100 mil más. Si se incluyen votos por MC, otros y los nulos, Morena quedó con el 45%.
En el escenario complejo para el partido oficial hay que aderezar la crisis política que enfrentan porque la virtual candidata presidencial, Claudia Sheinbaum, les quiere imponer como candidato a Omar García Harfuch, y esto provocó una fuerte rebelión de los fundadores del partido, los duros, que apoyan a Clara Brugada.
Lo peor para Brugada y Harfuch es que ya los desdibujaron, les hicieron perdieron su esencia. Ella era fuerte con las bases morenistas, con ese discurso de primero los pobres, pero ahora, al menos en su narrativa los abandonó, pues dice que hasta representa a las clases medias. Y Harfuch, cuyo principal atractivo político era no ser cercano al primer mandatario, ahora resulta que es más lopezobradorista que López Obrador. Si esto se combina con que el ex jefe de la policía no traía el respaldo de las bases morenistas, parece que puede terminar con saldo negativo.
En los próximos días se dará a conocer el método para elegir al candidato de la oposición a la CDMX. Para evitar inconformidades ya le ofrecieron a Cuevas tener fuero –que lo va a necesitar– con una diputación federal, y a Rubalcava ser senador, posición que en Morena no le pueden ofrecer porque si su amigo Harfuch fuera el candidato tendría que pagarle muy caro a los duros y no le va a alcanzar para Adrián. El sábado, el mensaje político fue muy claro: ya les ganó Taboada. Lo veremos.
