Ciudad de México 13 Mayo (MENSAJE POLÍTICO/CÍRCULO DIGITAL).- Cerca de 5 mil jóvenes que no estudian y buscan un empleo en este municipio, podrán recibir una beca de 43 mil 200 pesos al año, por capacitarse en pollerías, carnicerías, tlapalerías e incluso con vendedores ambulantes, de mercados y tianguis, en zonas de alto riesgo y marginalidad, indicó Jaime del Valle Aguilar, coordinador de Vinculación del programa federal Jóvenes Construyendo el Futuro.
En todo el país, el gobierno federal, a través de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), entregará este año un millón de becas a jóvenes que no estudian y buscan un empleo, de ellas 450 mil ya se otorgaron de acuerdo con el corte del 1 de mayo, informó Horacio Duarte Olivares, subsecretario del Empleo de la STPS.
Serán 40 mil millones de pesos que les llegarán directo a los muchachos a través de depósitos bancarios, en lo que será la segunda mayor inversión social, después del dinero que se dará a los adultos mayores, señaló Duarte Olivares.
“Tan sólo en Naucalpan se espera canalizar este año 5 mil becas a jóvenes de 18 a 29 años que no trabajan ni estudian, lo que sumaría 216 millones de pesos, que esperamos se queden en comunidades donde la gente vive en condiciones de alta marginación y de incidencia delictiva, donde los beneficiarios podrán tener como tutores a los propietarios de tortillerías, carnicerías o en el puesto de frutas de la esquina”, apuntó Del Valle Aguilar durante un recorrido realizado por EL UNIVERSAL en colonias como El Conde, en el margen del Río de los Remedios, con familias que viven en vagones de ferrocarril.
Hasta el 9 de mayo se habían registrado en Naucalpan más de mil centros de trabajo, 70% de ellos microempresas, para recibir becarios del programa federal Jóvenes Construyendo el Futuro, que se capacitarán a lo largo de un año, recibiendo una beca total de 43 mil 200 pesos, dividida en pagos mensuales de 3 mil 600 pesos, informó Del Valle Aguilar.
Con estas becas los jóvenes son incluidos en procesos productivos, además se integran al sistema financiero al manejar una cuenta y tarjeta bancaria, generando un historial para poder ser sujetos de crédito, afirmó el coordinador municipal de este programa federal.
Los jóvenes pueden ser capacitados en industrias, restaurantes, supermercados, cines y en empresas en diversas áreas, con excepción de trabajos de limpieza y de seguridad, aclaró Jaime del Valle, quien aseguró que ya hay casos de éxito de becarios naucalpenses a quienes están capacitando en el extranjero.
Becas a zonas marginadas
A sus 19 años de edad, Diego dejó de estudiar la prepa, donde además se instruía como laboratorista químico, porque “había que trabajar, no había dinero”, afirmó con cierta tristeza, mientras pelaba y picaba fruta fresca en su puesto, donde también vende piñas, sandías y melones por kilo en El Conde, junto al puente que cruza el Río de los Remedios, una de las zonas de mayor riesgo de Naucalpan.
Este vendedor de fruta, es candidato al programa Jóvenes Construyendo el Futuro, afirmó Del Valle Aguilar, ya sea como beneficiario o como tutor capacitando a otros jóvenes para que repliquen el autoemplearse, sumando ideas y haciendo crecer un negocio, indicó el funcionario.
César, quien abandonó sus estudios de Administración y llevaba más de un año buscando empleo, mostró orgulloso su tarjeta bancaria, en la que le depositaron el primero de 12 pagos mensuales de 3 mil 600 pesos, que recibió antes de empezar a trabajar como becario de este programa federal, para tener dinero y pagar pasajes, en su capacitación de trabajo comunitario donde tendrá la responsabilidad de vigilar el rescate de espacios públicos, en la colonia El Conde.
Como a César, el ayuntamiento de Naucalpan capacitará al menos a 30 jóvenes, que serán propuestos por dirigentes vecinales, para que trabajen en el rescate de zonas de alto riesgo de sus comunidades, como son módulos de policía abandonados, realizando actividades culturales, de activación física y recreativa para niños y adultos mayores, indicó Juan Manuel Miranda, delegado regional de Naucalpan.
Monserrat, una joven de 27 años, relató que se integró a este programa en enero, luego de enfrentar cuadros depresivos por no encontrar empleo, cuando terminó la carrera de Derecho en una universidad privada y ahora trabaja becada en un área jurídica del ayuntamiento de Naucalpan.
Neri, de 24 años, detuvo su motoneta, mientras circulaba junto al río de aguas negras, quien reconoció que le ha costado conseguir un empleo y afirmó que desconoce el programa Jóvenes Construyendo el Futuro, al tiempo que se mostró escéptico de que el gobierno dé 3 mil 600 pesos al mes por capacitarse, luego de escuchar la invitación que le hicieron funcionarios de darse de alta por internet.
En un vagón de ferrocarril, con los brazos tatuados con frases que denotan su depresión por haber perdido a su padre, Saraí, de 19 años, y Brenda, de 25 años, quien ya es madre de dos niños, sueñan con viajar y conocer el mar de Mazatlán, sitio que fue destino del tren en el que ellas nacieron.
“Si ambas reciben la beca”, esto les permitirá superar la marginación en la que han vivido por décadas, desde que el ferrocarril quedó estacionado en este punto de Naucalpan, apuntó Del Valle Aguilar.
Una central telefónica que opera en la avenida Río San Joaquín recibió en principio 150 becarios en capacitación, a los que ofreció dar una hora de inglés diaria, servicio de comedor, uniforme y zapatos.
