Fallida, la estrategia del Gobierno Federal contra el hambre y la pobreza

Ciudad de México a 24 de Noviembre (JUAN R. HERNÁNDEZ/CÍRCULO DIGITAL).-Carece de transparencia, objetividad y diseño integral, reclamaron legisladores federales de Morena al Titular de la SEDESOL, Luis Enrique Miranda.
Asimismo, lamentaron que dicha Secretaría aumentara su presupuesto en 30%, pese al incremento de mexicanos en situación de pobreza.

La estrategia del Gobierno Federal para combatir el hambre y la pobreza es totalmente fallida, ya que no ha dado resultados positivos en lo que va de la administración, por carecer de transparencia, objetividad y diseño integral; además, las cifras de la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL) no concuerdan con la grave realidad que enfrentan millones de mexicanos.

Así lo manifestaron los legisladores federales de Morena Araceli Damián, Karina Barón, Norma Xóchitl Hernández y Héctor Javier García, al Titular de la SEDESOL, Luis Enrique Miranda Nava, durante la comparecencia de éste en la Cámara de Diputados, con motivo de la Glosa del Quinto Informe de Gobierno.

En su oportunidad, Damián González aseveró que Morena no comparte ni acepta la estrategia contra la pobreza implementada por dicha dependencia. “Se basa en programas clientelares, en programas que son utilizados políticamente en cada elección; está a la vista de todos”, sostuvo la Secretaria de la Comisión de Desarrollo Social.

Asimismo, destacó que el pasado 10 de noviembre la bancada de Morena votó en contra del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2018, porque en éste no se destinan recursos a los mexicanos que más los necesitan. No obstante, denunció, la oficina que dirige Luis Miranda y el área de comunicación social de la SEDESOL recibieron un incremento del 30 y 10 por ciento a su presupuesto, respectivamente.

En ese contexto, pidió al Secretario Luis Miranda que no insista a la Cámara de Diputados que se modifique la Ley General de Desarrollo Social y se agregue una estrategia de inclusión, porque no se han visto los beneficios y además la medición de la pobreza es incierta.

“El INEGI violó la Ley General de Estadística, muy oportunamente, y no nos permitió tener una serie de datos de pobreza comparables, para efectivamente evaluar el Gobierno de Enrique Peña Nieto”, criticó la también Presidenta de la Comisión de Seguridad Social.

Agregó que si el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) hubiera medido la pobreza con el indicador modelado por la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH), la carencia en seguridad social hubiera aumentado de 55.8 por ciento a 67.9 por ciento, que en términos reales significa que 83 millones de mexicanos no tienen acceso a ésta.

Por último, Araceli Damián aseguró que la cobertura universal de salud que presume el Gobierno Federal es falsa, ya que el propio INEGI apuntó que 38 millones de personas no cuentan con acceso efectivo a este derecho constitucional.

Por su parte, la diputada Karina Barón Ortiz reclamó que pese al hambre y la pobreza en México, la SEDESOL celebrará su 25 aniversario y que se atreve a disfrazar dichos problemas en el sur del país, en particular la situación que padece el 70 por ciento de la población en Oaxaca.

Además, cuestionó la política de desarrollo que emplea el Ejecutivo Federal, debido a que actúa por coyuntura política y no por las necesidades que verdaderamente apremian a la sociedad. Peor aún, sostuvo, se trata de la falta de atención y empoderamiento de la mujer.

“Llegó el momento de impulsar una verdadera política social para las mujeres de todo el país. No más paliativos, no más discursos que desconocen la realidad de México. Las mujeres no pueden esperar más”, sentenció.

Al término de su intervención, Barón Ortiz interrogó al funcionario sobre una denuncia interpuesta ante la Procuraduría General de la República (PGR), en noviembre de 2016, contra 493 promotores sociales del Programa Pensión para Adultos Mayores, acusados de actos de corrupción.

A su vez, la diputada Norma Xóchitl Hernández Colín hizo alusión a que en 2016 la SEDESOL incrementaría el apoyo a programas productivos para que las personas en situación de pobreza contaran con alternativas de empleo y se les permitiera alcanzar un nivel digno de vida, a la vez que multiplicaría los recursos a programas sustentables, a través de la entrega de medios capitalizables.

Derivado de ello, la también Presidenta de la Comisión de Fomento Cooperativo y Economía Social inquirió a Miranda Nava sobre si se ha mejorado la calidad de vida de millones de mexicanos y logrado sacar del abandono al sector social de la economía. “La respuesta para nosotros es contundente: no”.

Asimismo, consideró que existe una falta de corresponsabilidad del Gobierno Federal con el sector social, debido a que éste aportó el 1 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), mientras la Federación le aporta sólo el 0.05 por ciento del Presupuesto.

En torno a ello, Hernández Colín, quien presidió la comparecencia, pidió al Titular de SEDESOL que asuma el compromiso con ese sector, que constituye una vía importante para la generación de empleos bien remunerados.

En su turno, el diputado Héctor Javier García Chávez atribuyó al modelo económico preponderante y a la falta de políticas públicas con sensibilidad social, que la población más vulnerable o en condiciones de pobreza no ha sido considerada como una opción de inclusión productiva, laboral y financiera.

Es por esa razón, subrayó, que este sector no contribuye a la conservación de los recursos naturales, a la generación de empleos bien remunerados, y al impulso económico y social.

“La economía social enfrenta un modelo económico que la margina, con empresas privadas que monopolizan ramos de actividad económica sin permitir la libre competencia, al tiempo que padecen la competencia desleal con productos importados y el predominio del capital sobre las personas”, concluyó.