«La minería de datos permite comprender las características cualitativas de los lugares. Esta técnica proviene de la ciencia de datos que conjunta la estadística, el aprendizaje de máquina (machine learning) y la lingüística computacional para procesar, limpiar e identificar patrones de datos no estructurados en formas de texto».
Ciudad de México, 4 agosto 2021 (REDACCIÓN / CDMX MAGACÍN).- Con estadística y minería de datos, el investigador Jorge Ruiz Reyes, del Programa de Derechos Humanos de la IBERO, propone una aproximación a las características geográficas de los hallazgos de las fosas clandestinas observadas por la prensa escrita entre 2007 y 2019 en México.
La prensa, las autoridades y colectivos de familias llevan sus propios registros. Hay información dispersa y fragmentada, motivo por el que el investigador sólo se concentró en observar la información reportada por la prensa escrita. En 13 años, las reporteras y los reporteros han consignado un 1 mil 491 fosas clandestinas en 320 municipios del país, en zonas rurales y urbanas.
Las cinco palabras que ubican la geografía de las fosas en México son predio, colonia, carretera, rancho y cerro. Las entidades con más hallazgos en zonas urbanas son Jalisco, en colonias e instalaciones universitarias de la Zona Metropolitana de Guadalajara.
En cambio, las entidades con más casos en zonas rurales son la frontera entre Jalisco y Michoacán, en campos de Morelos, en brechas y drenajes de Nuevo León, en ejidos y en puentes fronterizos de Tamaulipas, la Playa Agua Dulce de Veracruz, y los tiros de mina de Zacatecas.
«La minería de datos permite comprender las características cualitativas de los lugares. Esta técnica proviene de la ciencia de datos que conjunta la estadística, el aprendizaje de máquina (machine learning) y la lingüística computacional para procesar, limpiar e identificar patrones de datos no estructurados en formas de texto», define el reporte.
El académico expuso en un video publicado en el Canal de YouTube de la División de Investigación y Posgrado de la IBERO que el estudio es útil para análisis del contexto y planeación en materia de políticas públicas y programas contemplados en la Ley General en Materia de Desaparición Forzada y Desaparición Cometida por Particulares.
De acuerdo con el análisis, las fosas clandestinas reportadas por la prensa son las más impactantes y se dejan de lado los hallazgos con menor número de cuerpos exhumados. Con este estudio, el Programa de Derechos Humanos de la IBERO busca contribuir a generar pistas y seguir buscando a las personas desaparecidas; contrarrestar el fenómeno que lleva enlutando a las familias desde hace 15 años en México y no permitir que estos hechos queden impunes.
El reporte fue publicado en la plataforma Identificación Humana, avalada por la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH), la delegación para México y América Central del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y el proyecto Fortalecimiento del Estado de Derecho (FED) de la Cooperación Alemana al Desarrollo Sustentable.