- Fallaron los legisladores en su tarea de velar por los derechos de las mujeres: Femmva
- México continuará sin una ley que evite la cosificación de mujeres y niños
Ciudad de México a 03 de Mayo (MENSAJE POLÍTICO/CÍRCULO DIGITAL).-Integrantes de la agrupación Feministas Mexicanas contra Vientres de Alquiler (Femmva) manifestaron su indignación por la indiferencia de los legisladores, ya que las Comisiones y el pleno de la Cámara de Diputados, no discutieron ni aprobaron una ley federal para prohíbir la llamada maternidad subrogada en nuestro país.
“Al no afrontar la explotación reproductiva, los legisladores fallaron en su tarea de velar por los derechos de las mujeres y la infancia”, afirmó Laura Lecuona, integrante de Femmva. Explicó que en México no se ha dado la respuesta jurídica que garantice que los derechos de las mujeres no sean vulnerados.
“En el sistema legislativo sólo se han generado lagunas que ponen en riesgo a los niños nacidos por esta práctica y a las mujeres, expuestas a innumerables abusos de la inescrupulosa industria reproductiva”, dijo Lecuona. “Sabemos que la gestación por contrato, lejos de favorecer el bienestar de las mujeres y proteger sus derechos, únicamente beneficia a las empresas intermediarias, para quienes la explotación reproductiva de las mujeres es un negocio jugosísimo”.
Lecuona señaló que a pesar de haber sido una petición reiterada de Femmva al poder legislativo que antes de finalizar el periodo ordinario de sesiones se prohibiera la controvertida práctica también conocida como vientres de alquiler, “nos ha decepcionado que no hubiera respuesta, sino una total apatía por entender y resolver esto que es una forma más de violencia contra las mujeres, consistente en la mercantilización de sus cuerpos y la compraventa de sus hijos”, agregó.
La feminización de la pobreza en un contexto de globalización neoliberal es terreno fértil para que mujeres en precariedad sean explotadas por la industria reproductiva. “Mientras las mujeres mexicanas continúen enfrentándose a la discriminación, la falta de oportunidades y la dificultad para acceder a un empleo digno, muchas de ellas se verán orilladas a tomar decisiones desesperadas, exponiéndose a riesgos de diversa índole”, indicó Rocío Fernández, integrante de Femmva.
Fernández agregó que es común que las mujeres que son contratadas como madres gestantes no reciban suficiente información acerca de los riesgos asociados a los embarazos derivados de esta práctica. “Además, los contratos mercantiles que ellas firman suelen incluir cláusulas abusivas que limitan su autonomía. Esto es un claro retroceso en materia de derechos humanos”.
Atenea Acevedo, también integrante de la agrupación, señaló que en la maternidad subrogada las mujeres son obligadas a renunciar al derecho fundamental de filiación con el hijo al que van a parir, lo cual en la práctica es una redefinición de la maternidad, al negarse la condición de madre a la mujer que da a luz.
Acevedo añadió que una legislación a favor de la explotación reproductiva no asegura el bienestar de las mujeres ni asegura que vayan a salir de la pobreza, sino que solo sirve para el enriquecimiento de los intermediarios. “La mujer es cosificada por la industria de la tecnoreproducción, las agencias intermediarias, los clientes, y en ocasiones incluso por sus propios familiares”.
Las representantes de este grupo feminista señalaron que la maternidad subrogada es una inaceptable forma de violencia contra las mujeres. “No solamente es contraria a la ética y al feminismo, sino que representa múltiples riesgos tanto para las madres gestantes como para los infantes nacidos por esta práctica. No debe pasarse por alto que además de todo se presta a trata de mujeres y tráfico de niños”.
“Hacemos un llamado enérgico a los candidatos a la Presidencia de la República a incluir en sus agendas la prohibición expresa a la maternidad subrogada en nuestro país y a oponerse firmemente a esta práctica que representa un evidente retroceso en materia de derechos humanos”.