Ciudad de México 29 Abril (MENSAJE POLÍTICO/CÍRCULO DIGITAL).- Los padres de familia son quienes propician el contacto de sus hijos con la tecnología a edades cada vez más tempranas, evitando con ello el desarrollo de su creatividad e imaginación al cien por ciento, afirmó la psicoterapeuta Nancy Steinberg.
En entrevista con Notimex calificó como poco acertada la idea de que son prioridad las habilidades digitales para los menores de edad en un futuro y, al contrario, agregó que inducen a la inactividad a los niños al acercarles dispositivos como tabletas, celulares inteligentes o pantallas.
Comentó que no se trata de mostrar a la tecnología como negativa al momento de elegir un obsequio para los niños, sino de equilibrar su uso y propiciar un desarrollo saludable para los menores de edad.
Este 30 de abril se celebra en México el Día del Niño y de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares 2018, más del 10 por ciento de las personas que usan internet son niños entre seis y 11 años.
Se estima que los menores de edad pasan hasta 15 horas al día expuestos a pantallas de los dispositivos, señala la Boleta de Calificaciones Mexicana 2018.
Nancy Steinberg señaló que “hay una tendencia a regalar tecnología a los niños, ya no se les dan juguetes con los que los niños desarrollen su imaginación, de tal manera que solo interactúan con dispositivos o con aparatos que ya vienen programados para hacer cosas”.
Consideró que los padres regalan tecnología a sus hijos porque, en ocasiones, piensan que con ello les dan herramientas que les ayudará en su adolescencia, es decir, piensan que los capacitan para las carreras del futuro.
No obstante, dijo, lo que se hace es quitarles a los niños la posibilidad de ser niños.
Agregó que además de los problemas de sociabilidad, los niños sobreexpuestos a la tecnología presentan dificultades para concentrarse y aprender.
Mencionó que se ha reportado una relación entre déficit de atención y el número de horas cuando los menores de edad pasan más de 6 horas al día frente a la pantalla, ya que “regresan a lo que es el mundo real, les cuesta trabajo prestar atención”.
