CIUDAD DE MÉXICO, 14 de julio, (JUAN R. HERNÁNDEZ / MENSAJE POLÍTICO / CÍRCULO DIGITAL).- En el marco del evento científico Best of ASCO 2017, celebrado en la Unidad de Congresos del Centro Médico Nacional Siglo XXI del IMSS y después de 15 años sin novedades terapéuticas en cáncer de páncreas, Biotoscana México presentó Abraxus para suspensión inyectable (paclixatel unido a albúmina en una formulación de nanopartículas), que, junto con Gemcitabina, mejora la supervivencia global y representa un nuevo estándar de tratamiento en cáncer de páncreas metastásico.
Biotoscana México, que dirige el doctor Rodolfo Rosas Ramos es “la primera compañía biofarmacéutica latinoamericana enfocada en la innovación”. La empresa desarrolla, fabrica y comercializa “medicamentos avanzados, con el objetivo de tratar efectivamente necesidades médicas no satisfechas”, como es el caso con esta nueva molécula.
Esta empresa se concentra en productos “que hacen la diferencia en la práctica médica y transforman vidas de forma profunda y significativa. Nuestras áreas de operaciones principales son oncología, onco-hematología, enfermedades infecciosas graves, genética y enfermedades raras, así como inmunología e inflamación”.
Al hablar con el doctor José Athié Rubio, cirujano oncólogo, mencionó que “el cáncer de páncreas es una enfermedad en la que se forman células malignas (cancerosas) en los tejidos del páncreas. En un alto porcentaje los pacientes se detectan en etapas avanzadas de la enfermedad, metastásicos y no operables, con muy pocas alternativas de tratamiento”.
Es por ello que la disponibilidad de un medicamento nanotecnológico como es Abraxus®, permitirá cubrir una necesidad no satisfecha en el mundo de la oncología y en particular en cáncer de páncreas.
En un estudio publicado en The New England Journal of Medicine, estudio Fase III, “aleatorizado, abierto y multicéntrico, que se realizó en 11 países y 151 centros académicos y no académicos y que incluyó a 861 pacientes”, el uso de Abraxus demostró “un aumento significativo de la supervivencia global, de la supervivencia libre de progresión y tasas de respuesta, duplicando el número de pacientes vivos a 2 y 3 años y presentando un perfil de toxicidad manejable y bien tolerado por los pacientes”, agregó el doctor José Athié Rubio.