- Impulsan una contrarreforma netamente empresarial en perjuicio de los trabajadores.
Ciudad de México a 15 de Abril (AMPRYT/CÍRCULO DIGITAL).-Los senadores del PRI quieren dar “madruguete” y aprobar una contrarreforma que “significaría el acta de defunción del derecho laboral mexicano”. La propuesta que ellos impulsan es netamente empresarial e implica – entre otros riesgos – que desaparecerían las huelgas en México, “algo brutalmente demoledor”, aseguró el senador Luis Humberto Fernández Fuentes.
El vicecoordinador político del grupo parlamentario PT-Morena aseguró que los senadores de esta fracción se opondrán a cualquier intento de afectar a la clase trabajadora. “Podemos ser tremendamente competitivos como país, pero no a costa del dolor y de limitar a los trabajadores mexicanos”.
Señaló que una mejor apuesta para ser competitivos es disminuir la corrupción, nosotros como PT-Morena no vamos a abonar a esta estrategia de hacer pagar los perjuicios a los trabajadores.
Indicó que hay un dictamen que no fue elaborado en este Senado, sino en un despacho laborista empresarial en Monterrey, “lo cual ofende y agravia a la división de poderes y va contra la dignidad de los senadores”.
“Yo, en lo personal, no aceptaría ser mensajero, ni oficialía de partes de nadie, pero bueno, a ellos sí les alcanza su concepto de cinismo para prestarse a hacer un servicio de mensajería”, sostuvo.
El senador Luis Humberto Fernández reiteró que el problema en torno a esta ley es que trae un perfil completamente empresarial y de aprobarse el dictamen en los términos que se compartió, significaría el acta de defunción del derecho laboral mexicano”.
Explicó que esa propuesta resulta “irresponsable” porque toca las relaciones de producción en un momento muy peligroso, pues está en proceso la renegociación del Tratado de Libre Comercio.
“La precariedad del trabajo es uno de los temas laborales más delicados en México, y con esta ley se profundizaría esa condición, entonces eso alerta a los trabajadores en México y a los trabajadores fuera de nuestras fronteras, al grado que muchísimas organizaciones en Estados Unidos, Canadá, Sudamérica y Europa se han manifestado en contra de la posibilidad de la aberración de dictamen”.