En el “Encuentro interparlamentario con los países que integran el Triángulo Norte de Centroamérica (Guatemala, Honduras y El Salvador), ante la coyuntura de la migración hacia Estados Unidos”, sostuvieron que es fundamental que los gobiernos de esta región y de la sociedad civil trabajen de manera coordinada en el proceso de repatriación de migrantes.
El director general de Protección a Mexicanos en el Exterior, el embajador Jacob Prado González, indicó que representantes de las 50 oficinas de la red consular del país, mantienen contacto permanente con los centros y albergues de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados (ORR), donde permanecen migrantes que han sido separados de sus padres en Estados Unidos.
Agregó que actualmente la cancillería facilita la representación legal con abogados migratorios, penales y de lo familiar a los connacionales que radican en el país vecino del norte.
Prado González expuso que también se sigue avanzando en el mecanismo del Triángulo Norte de Centroamérica y México (Tricamex), encargado de llevar acciones conjuntas entre estos cuatro países, en beneficio de los migrantes.
Recordó que en 2017, se instrumentó la estrategia del Fortalecimiento para la Atención de Mexicanos en Estados Unidos (FAMEU), creada para apoyar a los connacionales con acciones de litigio estratégico, representación y orientación legal individual y diagnóstico migratorio.
Refirió que de 2017 a la fecha, 70 mil mexicanos recibieron orientación específica para obtener su doble nacionalidad. Y se ha atendido a más de un millón de personas, a través de las 42 ventanillas de asesoría financiera.
El director general de la Subsecretaria de América Latina y el Caribe de la SRE, Miguel Ignacio Díaz Reynoso, apuntó que el riesgo de la repatriación de connacionales, “nos obliga a pensar las acciones de colaboración con el Tricamex, para preparar el posible retorno”.
La directora de la Asociación Agenda Migrante, Eunice Rendón Cárdenas, sostuvo que la migración es un tema que trastoca a todos los países, por lo que debe haber una visión corresponsable y trabajar en bloque, con una estrategia más fuerte, integral y vinculante.
“El reto más grande es entender que en el mundo hay más de 247 millones de migrantes, por lo que es un tema internacional, y por ello, es fundamental que más allá de los tuits, los comunicados o los pronunciamientos, los gobiernos trabajen en bloque con una estrategia para actuar, porque nos hemos quedado en la reacción”, indicó.
Dijo que es preciso que México implemente una política migratoria más empática con la realidad y con la relación bilateral del país con Estados Unidos, en donde el centro sea la comunidad, pues lo que más se comparte entre ambas naciones, son personas.
“Es necesario entender que la comunidad es lo más importante y que la población migrante es bastante variada. La política migratoria mexicana ha sido más policiaca y le ha faltado empatía. Hace falta transitar a un modelo migratorio más humano, integral y transversal, con una estrategia más vinculante que permita el empoderamiento de la comunidad en retorno”, apuntó.
Refirió que en lo que va de la administración del presidente Donald Trump se han incrementado en 43 por ciento los arrestos de connacionales en Estados Unidos y se triplicó el número de personas detenidas sin ningún record criminal, en donde se basaron sólo en su perfil racial.
