CIUDAD DE MÉXICO, 12 de julio, (JUAN R. HERNÁNDEZ / MENSAJE POLÍTICO / CÍRCULO DIGITAL).-Uno de los mayores compromisos de Medix es sin duda la innovación. Desde sus inicios, el principal enfoque ha sido la investigación y desarrollo de nuevas soluciones en favor de los pacientes.
En días pasados, el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial le concedió a Medix el derecho exclusivo para comercializar en territorio nacional la combinación de Magaldrato y Domperidona en tableta masticable y suspensión; combinación que ya ha sido aprobada por la autoridad sanitaria de nuestro país, y es comercializada bajo el nombre “Medibutin”.
“En Medix consideramos que una invención sólo es verdadera innovación cuando llega al mercado, y cuando el usuario final se ve beneficiado de dicha invención. En este sentido, la innovación siempre actúa como un diferenciador frente a la competencia, gracias a la relación positiva entre Investigación, Desarrollo e Inversión”, aseguró la directora médica de Medix, Dra. Cecilia Fernández del Valle.
La patente de Medibutin es un diferenciador a favor del usuario, pues asegura a los consumidores que la calidad y eficacia del producto está garantizada por Medix toda vez que terceros no pueden copiar el producto Medibutin sin el consentimiento de Medix.
El proceso
Todo inicia en una idea o etapa creativa que genera un colaborador o un grupo de colaboradores de Medix® y que después se canaliza al Comité de Nuevos Productos y Servicios para evaluar la viabilidad médica, comercial, técnica y regulatoria de desarrollar esa idea, así como la factibilidad de solicitar una patente.
Una vez que se completa la fase creativa, se inicia el desarrollo de la invención en donde el reto fue tener tabletas robustas que resistieran el manejo en el empaque y que no fueran tan duras para poder ser masticadas con facilidad. Otro de los retos era lograr un sabor que fuera agradable para el usuario, porque uno de los activos tiene un sabor desagradable.
Medibutin en tabletas masticables de magaldrato y domperidona está indicado para el manejo sintomático de trastornos gastrointestinales asociados con hiperacidez y alteraciones en la motilidad gástricas como reflujo gastroesofágico, esofagitis, gastritis y dispepsia.
El magaldrato es un antiácido que neutraliza el ácido clorhídrico de las secreciones gástricas, mientras que la domperidona es un procinético que facilita el vaciamiento gástrico y disminuye la náusea y el vómito.
“A través de la patente se demostró la utilidad de asociar estos dos agentes para tratar la enfermedad por reflujo gastroesofágico y la dispepsia, ya que combaten el problema desde al menos tres formas de acción: neutraliza la acidez gástrica, aumenta el tono del esfínter esofágico e incrementa el vaciamiento gástrico”, menciono la Dra. Fernández.
La obtención de una patente es un proceso que en nuestro país puede durar hasta 8 años de acuerdo al Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI). En el caso de Medibutin, el proceso tomó aproximadamente 6 años y medio desde que presentamos la solicitud en el IMPI en octubre de 2010 hasta que se concedió la patente en abril de 2017.
El año pasado el laboratorio ingresó tres solicitudes de patente que buscan proteger combinaciones novedosas de fármacos, mismas que están dirigidas a las necesidades de los pacientes mexicanos.
“En términos de innovación, las oportunidades versan sobre la búsqueda de soluciones cada vez más eficaces y seguras, que se incorporen de forma amigable al estilo de vida de los pacientes para aumentar la adherencia al tratamiento”, siendo este el principal compromiso en nuestras investigaciones, finalizó la Directora Médica de Medix.